Apoyá los derechos de las personas transgénero
“Me llamo Sakris Kupila. Tengo 21 años, estudio Medicina y soy de Finlandia. Era aún un adolescente cuando me di cuenta de que soy transgénero, de que el género que se me asignó al nacer no dice realmente la verdad.
Había luchado durante años, desdichado y encerrado en mí mismo, intentando averiguar cómo crecer en un mundo que trataba de empujarme para que asumiera un rol totalmente equivocado. Un par de años después de caer en la cuenta de eso, hice otro descubrimiento: no podría vivir mi vida sin hacer la transición y empezar a vivir por fin de la manera que yo sentía natural y cómoda.
La legislación actual sobre reconocimiento legal de la identidad de género, sin embargo, exige que la persona sea mayor de 18 años, tenga un diagnóstico psiquiátrico y sea esterilizada o estéril. No soy estéril y no quiero serlo.
Me acuerdo del momento en que me di cuenta de que debía ser estéril para cambiar legalmente de género. Fue demoledor, y no era más que un niño. Supe que, según el gobierno, no debía tener derecho a disfrutar siquiera de la posibilidad de tener descendencia. Me sentí muy mal. Me sentí un extraño, como un monstruo. Sentí como si me clasificaran de subhumano basándose en mi identidad de género. Me sentí enfermo.
A causa de mi trabajo de defensa de los derechos de las personas transgénero, he sufrido acoso, intimidación, amenazas de palizas violentas y hostilidad abierta, que me han obligado a dejar mis estudios durante un año”.
Apoyá a los y las valientes y defendé a Sakris: exigí que el gobierno finlandés apoye a los defensores y defensoras de los derechos de las personas transgénero como Sakris, y que haga que el procedimiento para el reconocimiento legal de la identidad de género sea rápido, accesible y respete los derechos humanos.
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