Declaración de Amnistía Internacional en respuesta a los ataques aéreos contra un aeródromo del ejército sirio que Estados Unidos efectúo en Homs anoche, tres días después de un ataque con armas químicas que mató a más de 80 civiles en la provincia de Idleb.
El presidente Donald Trump aseguró que el ataque estuvo motivado por la preocupación por las vidas civiles sirias, pero su administración ha dado muestra de un cruel desprecio por la población siria que trata de huir para salvar la vida. Debe revocar de inmediato la prohibición de entrada a musulmanes y poner fin a las restricciones impuestas a las personas refugiadas que huyen del horror en Siria.
Asimismo, las fuerzas estadounidenses deben cumplir las obligaciones que les impone el derecho internacional humanitario y tomar todas las medidas posibles para proteger a la población civil cuando lleven a cabo acciones militares, lo que incluye abstenerse de utilizar armas prohibidas internacionalmente como las municiones de racimo. Los recientes ataques aéreos de la coalición dirigida por Estados Unidos en Irak y Siria han matado a centenares de civiles, entre ellos muchas mujeres y niñas y niños atrapados dentro de sus casas.
El Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas ha sido incapaz de proteger a la población civil de Siria en los últimos seis años. Ha envalentonado a todas las partes en el conflicto de Siria para que cometan crímenes terribles con impunidad. Es imprescindible que los Estados miembros adopten una resolución que garantice una investigación sobre el terreno del ataque químico efectuado en Jan Sheijun y que ayude a llevar a los responsables ante la justicia.