El traslado de la embajada de Estados Unidos en Jerusalén viola el derecho internacional y habilita a que se cometan crímenes de guerra, señaló Amnistía Internacional. Este acto se produce en medio de la represión por el gobierno israelí de personas palestinas desarmadas en Gaza que protestan contra las insostenibles condiciones de vida y reclaman el derecho a retornar.
Raed Jarrar, director de Incidencia para Oriente Medio y el Norte de África de Amnistía Internacional Estados Unidos declaró: “Mientras que el pueblo palestino conmemoraba la Nakba —el desplazamiento y desposesión de cientos de miles de palestinos hace 70 años de sus viviendas y negocios— e Israel celebraba el 70 aniversario de su creación, Estados Unidos decidió violar sus obligaciones contraídas en virtud del derecho internacional reconociendo de hecho la anexión ilegal de territorio ocupado.
Restos de un misil en un sitio de ataque.
“Puede que la Administración de Donald Trump presente este acto como un simple traslado de escritorios de un edificio a otro pero en realidad este acto apoya un crimen de guerra en curso: los asentamientos ilegales y la confiscación de tierras palestinas por parte de Israel”, indicó el vocero de Amnistía Internacional.
Uso excesivo de la fuerza
Hace unos días, decenas de personas palestinas perdieron la vida y cientos resultaron heridas como consecuencia de los disparos del ejército israelí durante las protestas ante la valla que separa Gaza de Israel.
Durante esas protestas, el ejército israelí hizo uso de la fuerza de modo desproporcionado. Esto constituye una violación de las normas internacionales. Incluso en algunos casos puede tratarse de homicidios deliberados que constituyen crímenes de guerra.
Si bien determinados manifestantes pueden haber cometido algún tipo de violencia, ello no justifica el uso de armas de fuego. Según el derecho internacional, es tipo de armamento sólo pueden usarse en caso de peligro inminente de muerte o lesiones graves.
Los primeros informes médicos recibidos de Gaza indican que decenas de personas recibieron disparos en la cabeza o en el pecho. El mes pasado, Amnistía Internacional presentó una investigación sobre la Franja de Gaza que demostraba que las fuerzas armadas israelíes estaban matando y mutilando a manifestantes que no representaban ninguna amenaza para ellas.
Estados Unidos es el principal proveedor de armas a Israel
Estados Unidos es el principal proveedor de tecnología y material militar de Israel aunque también hay otros países –entre ellos Estados miembros de la UE como Francia, Alemania, Reino Unido e Italia– que dieron licencias para enviar grandes cantidades de material militar a ese país.
“Estados Unidos, como proveedor, incumple sus propias leyes y permite la anexión ilegal por Israel de partes de Jerusalén y la construcción de asentamientos, lo que constituye un crimen de guerra”, agregó el director de Incidencia para Oriente Medio y el Norte de África de Amnistía Internacional Estados Unidos.
La organización internacional de derechos humanos señaló que en lugar de trasladar su embajada a Jerusalén, Estados Unidos debe imponer un embargo de armas inmediato a Israel, investigar si se utilizaron armas estadounidenses en violación de las leyes nacionales y trabajar con el Consejo de Seguridad de la ONU para remitir la situación de Israel y los Territorios Palestinos Ocupados a la Fiscalía de la Corte Penal Internacional.