A veces, escribir una carta puede cambiar la vida de otra persona. Esa es la premisa de Escribe por los Derechos, la campaña global de envío de cartas de Amnistía y el mayor evento de derechos humanos del mundo.
Cada mes de diciembre, simpatizantes de Amnistía de todo el planeta escriben millones de cartas en favor de personas cuyos derechos humanos fundamentales han sido conculcados. Son personas como tú, que continúan una larga tradición de envío de cartas para remediar algunas de las más graves injusticias del mundo. Y no se trata sólo de cartas: pueden ser peticiones, correos electrónicos, tuits, publicaciones en Facebook, fotografías, tarjetas postales...
Este año rendimos homenaje a algunos de los millones de mujeres que se alzan contra la injusticia... y pagan un precio muy alto por ello. Sin duda tus palabras pueden cambiar su vida. Únete.
Tus palabras hacen que las cosas cambien
¿Por qué tenemos que actuar? Porque, en un país tras otro, la libertad de las personas —para denunciar las injusticias, para vivir en sus tierras ancestrales, para no ser discriminadas— corre peligro. Nuestras cartas, nuestras palabras, nuestros actos ejercerán presión sobre las autoridades, que se verán obligadas a emprender acciones inmediatas para que quienes cometen abusos y tortura respondan ante la justicia. Y quienes sufren prisión injustamente podrán saborear de nuevo la libertad.
¿A quién escribimos? Cada año pedimos a nuestros simpatizantes que escriban dos cartas: Una irá dirigida a la persona que tiene la autoridad: puede ser un rey, un presidente, el jefe de la policía de un país... es decir, la persona que tiene en su mano hacer que se produzca el cambio. Y la otra irá dirigida a la persona (o grupo de personas) por cuyos derechos trabajamos, para que sepan que nunca las olvidaremos.
¿Sirve para algo? ¡Sí! Cada año, gracias a las cartas y las acciones, se producen cambios reales. Personas encarceladas injustamente recobran la libertad. Se lleva ante la justicia a torturadores. Y personas encarceladas reciben un trato más humano.
Escribe una carta, cambia una vida.