Vanessa Gómez Cueva es una mujer peruana de 33 años con residencia de más de 15 años en la Argentina. Aquí tenía trabajo como enfermera y vivía con sus tres hijos, argentinos, de 14, 5 y 2 años. A principios de febrero de este año, ella fue expulsada del país junto a su hijo más pequeño, por una causa penal relacionada al comercio de drogas que ya había sido cumplida.
La expulsión
El primero de febrero pasado, agentes de la Policía Federal fueron a buscar a Vanessa a su casa, y la llevaron, junto a su pequeño hijo de dos años, a la comisaría para firmar una notificación. Pero ya nunca regresaría a su casa y, hasta el día de hoy, ese fue el último día en que vio a sus dos hijos mayores.
El caso
Gómez Cueva fue condenada en el año 2013 a cuatro años de prisión por tenencia de estupefacientes, para su comercialización. Cumplió su condena y salió en el año 2014. "Estaba en prisión preventiva desde antes, por eso se fue al año de la condena", explica Villanueva.
En 2015, Migraciones decide la expulsión del país de la mujer por sus atencedentes. La Defensoría del Migrante, dependiente de la Defensoría General de la Nación, asesoró entonces a Vanessa y presentaron un recurso para evitar la expulsión. El recurso fue rechazado, pero la notificación jamás le llegó a la mujer.
Según Villanueva: "La notificación llegó a un domicilio donde ella había vivido ni bien llegó a Argentina, cuando ella había dejado el domicilio de Defensoría para recibir notificaciones. Entonces, como Vanessa no sabía, no actuó judicialmente y la expulsión quedó firme".
Por eso, finalmente, la mujer fue detenida el pasado 1 de febrero, y expulsada de manera drástica tres días después.
Cabe destacar, que en todo ese tiempo, entre el cumplimiento de su condena, hasta su expulsión, Gómez Cueva había tenido una conducta ejemplar. "Ella tuvo una sola condena en Argentina, desde entonces no delinque, estudió, se recibió, trabajaba como enfermera -cuenta Villanueva-, tiene tres hijos argentinos que están escolarizados. Es un paradigma de resocialización".
Además de la parte emocional que significa ser separada de sus hijos, Fontoura Márques agrega que Vanessa "es madre soltera y era el sostén de la familia". La integrante de Amnistía Internacional dice que ahora en Lima, la mujer expulsada "busca la manera de sostenerse, vive una situación precaria y está buscando instalarse porque, hasta que no pueda regresar, no le queda otra".
Fuentes de la Dirección Nacional de Migraciones informaron a LA NACION: "Si bien se consideró la situación personal y familiar de la ciudadana peruana, se continuó el procedimiento de expulsión ya que la normativa establece que el delito de narcotráfico no puede ser dispensado por el Ministerio del Interior ni por Migraciones".
La defensa de Vanessa
En contraste con la aseveración de Migraciones, Villanueva dice: "La misma ley de migraciones establece el principio de la unidad familiar y el principio de reunificación familiar que está en las convenciones internacionales de Derechos Humanos y establecido en los derechos del niño, que tienen jerarquía supraconstitucional".
"Su expulsión viola el derecho a la vida familiar", concluye la carta de Amnistía Internacional al titular de Migraciones.
"En este momento hay varias acciones judiciales en curso. Presenté, entre otras medidas, una apelación contra la sentencia de expulsión en la Juzgado en lo Contencioso Administrativo Federal Número 5, de la Doctora (María Alejandra) Biotti que fue rechazado -narra Villanueva-. También un amparo que terminó en el mismo juzgado".
Esos recursos fueron presentados por la vía judicial, pero por la administrativa, el abogado de la mujer deportada realizó una presentación ante Migraciones pidiendo que "se deje sin efecto la prohibición de regreso y le permitan a Vanessa volver a Argentina". el abogado es contundente: "Resolviendo esta presentación que yo hice el 14 de febrero, se acabó el problema acá. Una firma de Horacio García y termina todo esto, hoy".
Por su parte, fuentes de Migraciones dejaron abierta una posibilidad de rever el regreso de Gómez Cueva: "A pesar de estar fuera de término la interposición de recursos tanto administrativos como judiciales, Migraciones recibió una presentación de sus apoderados (de Vanessa) y la está considerando a los efectos de tomar una resolución e informarla".