BERLÍN, 20.02.2020
“La protección frente al racismo es un derecho humano y una cuestión de seguridad nacional”.
El secretario general de Amnistía Internacional Alemania, Markus N. Beeko, declaró sobre el atentado racista de Hanau (Alemania):
“Nuestros pensamientos están con las familias y las amistades de las víctimas de este atentado aparentemente racista perpetrado en Hanau. Y nos solidarizamos con todas las personas cuya vida cotidiana en Alemania está cada vez más empañada por el miedo a sufrir una agresión debido a sus creencias o a su supuesto origen”.
“Es justo e importante que el fiscal general federal de Alemania y los organismos de seguridad dediquen una atención creciente a la lucha contra la violencia racista y misantrópica de las últimas semanas. La protección frente al racismo es un derecho humano y una cuestión de seguridad nacional. Es urgente mejorar la dotación de personal y contar con un método informado de análisis y reconocimiento de los problemas, y con un enfoque más resuelto para abordar las redes y estructuras racistas. Ha quedado patente que las importantes recomendaciones de las comisiones parlamentarias de investigación sobre la organización de extrema derecha Clandestinidad Nacionalsocialista (NSU) no se han implementado en absoluto hasta ahora o sólo lo han sido de forma insuficiente. Ahora hace falta una implementación mucho más completa y resuelta del plan de acción nacional contra el racismo”.
“Todas las personas tenemos el deber de exigir a los agentes políticos y a las autoridades que asuman su responsabilidad de garantizar que nadie en Alemania siente temor por ser musulmán o musulmana, judío o judía; por ayudar a las personas refugiadas, por su adscripción a un determinado sector de la población o por ser una personalidad política que toma postura a favor de los derechos fundamentales y los derechos humanos”.