Amnistía Internacional adhiere al Paro de Mujeres, Lesbianas, Travestis y Trans que se lleva adelante en el marco del Día Internacional de la Mujer. Además, la organización participará de la concentración que se realizará hoy a las 17 frente al Congreso de la Nación.
Aborto legal: Inauguramos el primer #8M con el reconocimiento del derecho a la autonomía reproductiva de las mujeres y personas con capacidad de gestar en nuestro país. Después de años de lucha, el movimiento de mujeres logró la sanción de la Ley IVE (N°27.610) que reconoce el derecho a acceder a un aborto seguro y gratuito en el sistema de salud.
Luego de esta victoria en Argentina, la marea verde trascendió las fronteras y se expandió hacia América Latina y el resto del mundo. Una muestra de ello es el reciente debate por la legalización del aborto que tuvo lugar en Quintana Roo, México. El acceso la interrupción del embarazo es esencial para realizar todos los derechos humanos y lograr la justicia de género, social, reproductiva y económica.
Violencia: Conforme datos de la sociedad civil, en lo que va del año se produjeron más de 52 femicidios. Se reiteran los casos donde los victimarios tenían numerosas denuncias previas, violaron las restricciones perimetrales o formaban parte de las fuerzas de seguridad. Esto pone en evidencia la falta de políticas públicas efectivas para dar respuesta a esta problemática y la falta de perspectiva de género en los operadores de justicia.
Desde Amnistía Internacional creemos que es indispensable investigar las deficiencias de las políticas públicas existentes; abordar las causas profundas de los femicidios, transfemicidios y travesticidios; adoptar un enfoque interseccional que interpele a los distintos actores estatales involucrados; profundizar la formación y concientización sobre las distintas formas y dimensiones de la violencia de género; y abordar críticamente la construcción social sobre las masculinidades para lograr un cambio social de fondo.
ESI: A quince años de la sanción de la Ley de Educación Sexual Integral, aún no tiene una implementación plena y homogénea en todo el país, y existen resistencias en algunas jurisdicciones a la integración curricular. La ESI es una herramienta central para que los niños, niñas y jóvenes puedan tomar decisiones informadas sobre su cuerpo, su sexualidad y su salud, aprender a construir relaciones equitativas, comprender la importancia del respeto de la diversidad, prevenir situaciones de abuso sexual, identificar situaciones de violencia y conocer métodos para prevenir embarazos no intencionales, entre otros aspectos fundamentales. Accedé a la página de ESI de Amnistía Internacional.
Representación de las mujeres en organismos gubernamentales y en la justicia: Se perpetúa la histórica exclusión de las mujeres de los espacios de decisión en los tres poderes del Estado. En el ámbito legislativo, pese a los avances de leyes de paridad en el ámbito nacional y en algunas jurisdicciones, su aplicación efectiva ha sido objeto de disputa judicial. En el ámbito del Poder Ejecutivo, en la actualidad solo son 4 las mujeres que ocupan cargos ministeriales, representando el 19% de la administración. El techo de cristal en la Justicia se pone en evidencia con el Mapa de Género de la Justicia Argentina, actualizado en 2019 por la Corte de Suprema: solo el 28% de mujeres ocupan cargos de juezas y camaristas en la justicia federal, mostrando una base mayoritaria de mujeres y una cúpula mayoritaria de varones.
Sistema integral de Cuidados: La pandemia exacerbó las desigualdades de género preexistentes. Las mujeres realizan más del 76% del trabajo doméstico y de cuidados en el país y dedican diariamente 96 millones de horas de trabajo no remuneradas a las tareas del hogar y los cuidados. Es indispensable evitar que se continúen profundizando las brechas de género y avanzar hacia un sistema integral de cuidados que promueva una redistribución equitativa de estas tareas.
Trabajo sexual: El colectivo de trabajadoras sexuales denunció un incremento en el hostigamiento y persecución hacia trabajadoras y trabajadores sexuales cisgénero y trans por parte de las fuerzas de seguridad de la Ciudad de Buenos Aires en el contexto de las medidas adoptadas para dar respuesta a la Pandemia. Con el propósito de dar continuidad al trabajo global de condenar la criminalización de la salud sexual y reproductiva, incluyendo el trabajo sexual, Amnistía Internacional acompaña el reclamo por la derogación del Art. 86 del Código Contravencional y de Faltas de CABA del colectivo.
Estas y otras formas de manifestación de violencia de genero nos unen este #8M para exigir políticas públicas y respuestas efectivas.