Ante la noticia de que el defensor de derechos humanos burundés Germain Rukuki ha quedado en libertad después de cumplir más de cuatro años de prisión, Deprose Muchena, director de Amnistía Internacional para África Oriental y Austral, ha declarado:

“Es una gran noticia que Germain por fin esté en libertad. Nunca debería haber sido encarcelado, ya que su detención, juicio y condena se debieron simplemente a su labor de defensa de los derechos humanos.”

“Es un gran momento para Germain, para su familia y amistades y para los cientos de miles de personas que han hecho campaña incansablemente por su liberación en todo el mundo. Es, además, un triunfo para los derechos humanos.”

La liberación de Germain sucede a la decisión de reducir su condena de 32 años a uno, adoptada por el tribunal de apelación el 4 de junio.