En respuesta a la detención de al menos 1.386 manifestantes pacíficos que participaban en concentraciones en diferentes lugares de Rusia tras la llamada del presidente Vladimir Putin a movilizar tropas adicionales para combatir en Ucrania, Denis Krivosheev, director adjunto de Amnistía Internacional para Europa Oriental y Asia Central, ha afirmado:
“Mientras el presidente Vladimir Putin trata de aumentar el suministro cada vez más escaso de tropas para la invasión rusa de Ucrania, miles de ciudadanos y ciudadanas rusos en todo el país han marchado pacíficamente por las calles para protestar contra la movilización y la guerra. Alzan su voz a pesar de la represión que se ejerce sobre su derecho a la libertad de expresión y de reunión pacífica y cuando nuevas leyes represivas penalizan toda forma de actividad contra la guerra".
“Todas las personas tienen derecho a expresar libremente sus opiniones y a protestar pacíficamente, también como respuesta a la agresión rusa contra Ucrania. Todas las personas detenidas únicamente por protestar de forma pacífica contra la movilización y la guerra deben ser puesta en libertad inmediata e incondicional, y debe ponerse fin a toda represalia contras las voces discrepantes en Rusia".
“La comunidad internacional debe intensificar sus esfuerzos para poner fin a la agresión rusa contra Ucrania, entre otras cosas apoyando a quienes protestan pacíficamente contra la invasión o se niegan por motivos de conciencia a participar en el conflicto.”
Información complementaria
Para detener a las personas que se manifestaban, los agentes de policía hicieron un amplio uso de fuerza innecesaria y excesiva, como golpes con porras y técnicas de inmovilización por el cuello. En San Petersburgo, una persona sufrió fractura de un brazo tras ser golpeada por la policía.
Según la organización de derechos humanos independiente OVD-Info, la policía entregó citaciones para alistarse en centros de reclutamiento militar a varios varones detenidos ayer en Moscú y en Voronezh, en el centro de Rusia. Los detenidos también corren el riesgo de ser sometidos a enjuiciamiento administrativo o penal.
Amnistía Internacional lleva a cabo actualmente una campaña global para hacer frente a los ataques sin precedentes contra manifestantes pacíficos en todo el mundo. Entre otras cosas, la campaña insta a los gobiernos a cesar en el uso indebido de los sistemas judiciales penales, civiles y administrativos para silenciar y disuadir a quienes protestan.
Todas las personas tienen derecho a expresar libremente sus opiniones y a protestar pacíficamente, también como respuesta a la agresión rusa contra Ucrania.
