Amnistía Internacional y las organizaciones de defensa de la libertad de los medios de comunicación, la libertad de expresión y los derechos humanos condenan enérgicamente la detención, el 25 de julio en Turquía, de Sibel Yükler, redactora de T24; Delal Akyüz y Fırat Can Arslan, reporteros de la Agencia Mezopotamya; Evrim Kepenek, redactora de Bianet, y Evrim Deniz, periodista independiente.
Mientras que cuatro de esos periodistas quedaron en libertad condicional, Arslan fue detenido más tarde ese mismo día. Exigimos su puesta en libertad inmediata.
En los medios de comunicación locales se informó de que los periodistas habían sido detenidos por sus publicaciones en las redes sociales sobre la reasignación por el Consejo de Jueces y Fiscales (HSK) de un fiscal y una jueza, con la que el primero está casado, implicados en la causa judicial reciente de 18 periodistas en Diyarbakır. Según informes, a los periodistas se los acusa de “revelación, publicación y señalamiento de un funcionario público en el ejercicio de su trabajo de lucha contra el terrorismo” (Ley Antiterrorista, art. 6.1).
Yükler, redactora de T24, fue detenida durante una redada en su domicilio de Ankara a primera hora de la mañana y trasladada al departamento de policía de Ankara. A última hora del día fue puesta en libertad bajo control judicial, incluida la prohibición de viajar al extranjero.
Al reportero de MA Arslan también lo detuvieron en un registro domiciliario matutino en su casa de Ankara durante el que, según informes, la policía se incautó de su teléfono y su ordenador. Arslan fue detenido ese mismo día con el cargo de “señalamiento de un funcionario público en el ejercicio de su trabajo de lucha contra el terrorismo”.
Akyüz, reportero de MA, fue detenido en su domicilio de Esmirna a primera hora de la mañana y trasladado a una comisaría de policía del distrito de Çankaya. Ese mismo día quedó en libertad y fue sometido a control judicial, incluida la prohibición de viajar al extranjero.
Kepenek, redactora de Bianet, fue detenida ese mismo día por la tarde en su domicilio de Estambul. La policía se incautó de su equipo digital y la esposó con esposas de plástico antes de llevarla a una comisaría de Taksim, en el centro de Estambul. La policía declaró que Kepenek había sido detenida en el marco de una investigación llevada a cabo por la Fiscalía General de Diyarbakır por “revelación, publicación y señalamiento de un funcionario público en el ejercicio de su trabajo de lucha contra el terrorismo”. Tras pasar un día bajo custodia, Kepenek fue conducida al Tribunal de Estambul con esposas de metal la mañana del 26 de julio. Ese mismo día quedó en libertad y fue sometida a control judicial, incluida la prohibición de viajar al extranjero.
La periodista independiente Deniz fue detenida tras acudir a una comisaría local de Diyarbakır para prestar declaración a petición de la policía local. Ese mismo día quedó en libertad y fue sometida a control judicial, incluida la prohibición de viajar al extranjero.
El artículo 6.1 de la Ley Antiterrorista, en virtud del cual se investiga a los periodistas, se está utilizando indebidamente para castigarlos por difundir información de interés público que está a disposición pública. El Comité de Ministros del Consejo de Europa ha expresado anteriormente sus reservas sobre la aplicación de la disposición, porque no reconoce la defensa de la verdad y el interés público.
El hecho de que el fiscal que redactó el acta de acusación formal contra los periodistas que fueron detenidos en masa resultara estar casado con una jueza que formaba parte del tribunal de esa misma causa, y que el fiscal y la jueza fueran posteriormente reasignados a otros puestos, es información pública y es de interés público. Por lo tanto, la información y su difusión deben considerarse una actividad periodística.
Según el Sindicato de Periodistas de Turquía (TGS), miembro de la Federación Europea de Periodistas (FEP), a 12 de julio de 2023 había 20 periodistas en prisión.
Nos solidarizamos con los periodistas detenidos y pedimos a las autoridades turcas que pongan fin al uso abusivo de la legislación antiterrorista y a la detención arbitraria y sistemática de periodistas.