La dimisión del presidente provisional de la República Centroafricana, Michel Djotodia, amenaza con agravar el riesgo de pérdida de vidas civiles e indica que es necesario aumentar con urgencia el número de efectivos de las fuerzas para el mantenimiento de la paz en el país, manifestó Amnistía Internacional hoy.
El incumplimiento por parte de la Unión Africana de su promesa de desplegar en el país todo un contingente de fuerzas para el mantenimiento de la paz hace que éstas sean insuficientes para proteger a la población, que es sumamente vulnerable.
“Más de un mes después de la votación celebrada en la ONU hay todavía menos de 4.000 efectivos de la Unión Africana, además de los 1.200 franceses. Mientras tanto han perdido la vida más de un millar de personas y centenares de miles siguen atrapadas en campos para la población desplazada, porque tienen demasiado miedo para regresar a sus hogares. “La tensión va a aumentar de manera especial en la República Centroafricana tras la dimisión del presidente provisional, y pondrá de relieve la necesidad urgente de brindar mayor protección a la población civil”, dijo Amnistía.
“La dimisión de Djotodia hoy podría desencadenar fácilmente ataques de venganza de las milicias cristianas ‘antibalaka’ contra la comunidad musulmana. Las fuerzas musulmanas que integraban Seleka también están fuertemente armadas, por lo que se corre realmente el riesgo de que la violencia se intensifique aún más. La seguridad y la protección de los civiles tienen que ser primordiales.”
“A medida que se intensifican en todo el país el odio y la desconfianza entre comunidades, tiene que haber información clara, ampliamente transmitida a la población, sobre qué medidas van a adoptarse a continuación en materia de seguridad.”
“Esta situación de violencia absoluta persiste desde hace demasiado tiempo. Es hora ya de que la comunidad internacional tome medidas más concretas para restablecer la paz y la seguridad en el país.”