Consejo de Derechos Humanos de las Naciones Unidas

21º periodo extraordinario de sesiones

23 de julio de 2014

Señor Presidente:

Amnistía Internacional señala que, una vez más, el Consejo de Seguridad de la ONU no ha respondido adecuadamente a otro quebrantamiento de la paz y la seguridad internacionales y a la consiguiente situación de emergencia de los derechos humanos en la Franja de Gaza e Israel. Una vez más, el Consejo de Derechos Humanos ha de llenar este vacío y actuar como la voz de la comunidad internacional en esta situación.

Instamos al Consejo de Seguridad a que imponga un embargo de armas inmediato y general a Israel, Hamás y los grupos armados palestinos con el fin de prevenir nuevas violaciones graves del derecho internacional humanitario y violaciones y abusos contra los derechos humanos.

Lamentamos que, de nuevo, el papel de este Consejo esté limitado a intervenir después de una catástrofe. Han de encontrarse vías para que la ONU, incluido este Consejo, contribuya de un modo más eficaz a poner fin a la violencia y prevenir una violencia similar en el futuro. El Consejo de Derechos Humanos debe desplegar de inmediato una misión de observación para que informe de la evolución de la situación al propio Consejo, así como al Consejo de Seguridad y a los demás órganos pertinentes.

Además, Amnistía Internacional respalda la propuesta de enviar con carácter urgente una comisión internacional de investigación independiente para que investigue todas las violaciones y abusos contra el derecho internacional de los derechos humanos y el derecho internacional humanitario cometidos por todas las partes en las actuales hostilidades.

 

Esta comisión de investigación deberá:

- contar con recursos suficientes para realizar investigaciones imparciales con las competencias necesarias en la realización de investigaciones penales y forenses;

- tener acceso sin restricciones a todas las zonas pertinentes y autoridad para acceder a todos los documentos, otras pruebas y personas pertinentes;

- ser exhaustiva, independiente e imparcial e investigar cualquier violación de derechos humanos o abuso, así como las violaciones del derecho internacional humanitario que haya cometido cualquier parte del conflicto desde el 12 de junio de 2014, incluido el secuestro y asesinato de tres adolescentes israelíes y las medidas posteriores equivalentes a un castigo colectivo impuesto por Israel a la población palestina en Cisjordania y otros lugares;

- emplear como base el análisis y las conclusiones de la Misión de Investigación de la ONU sobre el Conflicto de Gaza (2008-2009) presidida por el juez Richard Goldstone; y

- hacer recomendaciones sobre las medidas que deberán adoptar las partes del conflicto, el Consejo de Seguridad y otros para poner fin a las violaciones del derecho internacional, prevenir que se cometan en el futuro y garantizar justicia, verdad y una reparación completa a las víctimas, así como garantías de no repetición.

La impunidad fomenta inevitablemente que se cometan nuevas violaciones y no se debe permitir que continúe existiendo. Esta vez la comunidad internacional debe respaldar plenamente unas medidas que garanticen la rendición de cuentas y la justicia para las víctimas. No debe desaprovechar la oportunidad, como hizo cuando no se aplicaron las recomendaciones del Informe Goldstone. Las autoridades israelíes no enjuiciaron a los presuntos autores de crímenes de derecho internacional. Ni Israel ni Hamás realizaron investigaciones creíbles, independientes y con arreglo al derecho internacional.

Amnistía Internacional pide que el resultado de la investigación de la comisión incluya un plan para garantizar el enjuiciamiento de las personas que hayan ordenado o cometido presuntamente crímenes previstos por el derecho internacional. A tal fin, el Consejo de Derechos Humanos deberá pedir a la Asamblea General de las Naciones Unidas que garantice que el informe de la comisión de investigación se presenta lo antes posible ante el Consejo de Seguridad, a fin de que éste pueda estudiar si debe remitir la situación a la Corte Penal Internacional. Los Estados deberán utilizar el informe como base para ejercer la jurisdicción universal a fin de iniciar en sus tribunales nacionales investigaciones y procesamientos por los crímenes de guerra cometidos durante el conflicto.

Mientras las fuerzas israelíes continúan bombardeando implacablemente Gaza, lo que ya ha costado más de 600 vidas —en su mayoría de civiles— y destruido cientos de viviendas e infraestructuras civiles, y Hamás y los grupos armados palestinos persisten en lanzar cohetes de forma indiscriminada contra ciudades y pueblos israelíes, es imprescindible que el Consejo de Derechos Humanos transmita de la forma más clara posible el mensaje de que todas las partes deben poner fin a la violencia y respetar el derecho internacional humanitario y de los derechos humanos, que deberán rendir cuentas si no lo hacen y que los perpetradores de crímenes de derecho internacional responderán de ellos ante la justicia.

 

Gracias, señor Presidente