Amnistía Internacional se reunió ayer con el senador radical Luis Naidenoff para conversar sobre la necesidad de avanzar con una ley que legalice el aborto en Argentina.
En la semana en que la organización lanzó una acción urgente global para pedir al presidente de la Nación, Alberto Fernández, que honre el compromiso asumido y presente el proyecto para legalizar el aborto en 2020, Amnistía Internacional recordó que el la deuda del Estado argentino con los derechos de las mujeres es de todo el arco político.
“Todos los años, el 25% de los embarazos acaban en abortos inducidos en el mundo. Con independencia de que el aborto sea o no legal, las mujeres siguen accediendo a esta práctica de manera habitual. El Estado, en su conjunto, no puede seguir dando vuelta la cara”, marcó Mariela Belski, directora ejecutiva de Amnistía Internacional.
El Congreso en pleno, tanto desde el oficialismo como desde la oposición, debe trabajar para dar respuesta a las más de 3000 muertes por aborto de los últimos 30 años, y la 39.000 internaciones anuales por la misma causa.
En este sentido, el senador por la provincia de Formosa renovó su compromiso para despenalizar y legalizar el aborto en Argentina.
El Poder Legislativo tiene una oportunidad histórica para adecuar el ordenamiento jurídico interno a los estándares internacionales de los derechos humanos, y así acompañar la tendencia global que busca desestimular el uso de la herramienta penal como respuesta a la regulación del acceso de las mujeres a sus derechos sexuales y reproductivos y garantizar al aborto legal y seguro.
Amnistía Internacional seguirá haciendo campaña aquí y en el mundo para que el próximo país en decir Adiós al aborto inseguro sea Argentina.