Al menos
41 srilankesas, en su mayoría trabajadoras domésticas migrantes, llevan meses
detenidas arbitrariamente en un centro de deportación de Arabia Saudí, esperando ser repatriadas a su país de origen,
ha revelado hoy Amnistía Internacional.
Las mujeres llevan recluidas en el Centro de Detención y Deportación (
Tarheel) de Riad entre 8 y 18 meses.
Al menos 3 de ellas tienen hijos o hijas de corta edad que están detenidos junto con ellas, y una necesita atención médica y un tratamiento urgente que no está recibiendo.
Su terrible situación es un claro ejemplo de la situación de las trabajadoras domésticas atrapadas en el
sistema de patrocinio (kafala), intrínsecamente abusivo. En marzo de 2021, Arabia Saudí introdujo
reformas importantes en su sistema de kafala, aunque excluían a los trabajadores y trabajadoras domésticas que representan hasta el 30% de los 10 millones de personas trabajadoras migrantes del país.
“Es cruel e inhumano detener a trabajadoras migrantes por periodos prolongados de hasta 18 meses cuando no han hecho nada y son a su vez víctimas. Estas mujeres dejaron atrás su casa y su familia para ganar el sustento en Arabia Saudí sólo para encontrarse encerradas en un sistema de patrocinio abusivo que facilita la explotación y los abusos. Ahora están detenidas indefinidamente sin posibilidad de recurrir contra su detención y sin saber cuándo podrán ver de nuevo a sus seres queridos”, dijo Lynn Maalouf, directora adjunta de Amnistía Internacional para Oriente Medio y Norte de África.