En Chile hay un doble sistema de justicia que permite a los agentes de policía golpear, maltratar y, en algunos casos, incluso matar a manifestantes pacíficos y a otras personas, porque, como mucho, les impondrán sólo una sanción mínima. Así lo manifestó Amnistía Internacional hoy en un nuevo informe.
El informe titulado
"No sabía que existían dos justicias" Justicia militar y violencia policial en Chile" , revela que, de manera habitual, los tribunales militares de Chile, , no abren investigaciones ni procesamientos contra los agentes sospechosos de haber cometido un delito. Los juicios ante estos tribunales no suelen presentar ni siquiera el grado más básico de independencia e imparcialidad.
Estadísticas brutales
Los tribunales militares
raras veces dictaron sentencias condenatorias contra agentes de las fuerzas de seguridad sospechosos de cometer violaciones de derechos humanos. En las contadas ocasiones en que se abre realmente una investigación, el proceso se celebra a puerta cerrada, la condena es manifiestamente leve y el agente no suele ir a prisión.
De acuerdo con estadísticas oficiales analizadas por Amnistía Internacional, en uno de los seis tribunales militares del país (el Segundo Juzgado Militar de Santiago), sólo el 0,3 por ciento de los casos de abusos contra manifestantes registrados en 2005, 2008, 2011 y 2014 fueron objeto de proceso penal (14 de 4.551).
"El Congreso tiene que someter a debate
un proyecto de ley que conceda a los tribunales civiles jurisdicción sobre los casos de violaciones de derechos humanos cometidas por miembros de las fuerzas armadas y la policía" afirmó Mariela Belski, Directora Ejecutiva de Amnistía Internacional Argentina.
Se puede conseguir el informe en https://www.amnesty.org/es/documents/amr22/3209/2016/es/