“Está previsto que
dos activistas chinos de derechos humanos sean sometidos a juicios manifiestamente injustos a puerta cerrada esta semana tras estar en el punto de mira del gobierno y haber sido torturados debido a su trabajo pacífico”, ha declarado hoy Amnistía Internacional.
El jurista Xu Zhiyong y el abogado defensor de los derechos humanos Ding Jiaxi comparecerán ante un tribunal el miércoles y el jueves, respectivamente, para responder de cargos falsos de “subvertir el poder del Estado”.
“Las autoridades chinas han atacado a
Xu Zhiyong y a Ding Jiaxi no porque hayan cometido algún delito reconocido internacionalmente, sino sólo por tener opiniones que no gustan al gobierno. Estos juicios injustos son un indignante ataque contra sus derechos humanos”, declaró Gwen Lee, responsable de campañas de Amnistía Internacional sobre China.
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Tras haber sufrido tortura y otros malos tratos durante su reclusión arbitraria, Xu Zhiyong y Ding Jiaxi podrían ser condenados ahora a años de prisión en juicios secretos amañados desde el principio”.
Xu y Ding son miembros destacados del Movimiento Nuevos Ciudadanos, una red informal de activistas fundada por Xu en 2012 para promover la transparencia del gobierno y denunciar la corrupción.
Ambos estuvieron entre las decenas de abogados, abogadas y activistas en el punto de mira de las autoridades tras asistir a una reunión informal celebrada en Xiamen, ciudad de la costa suroriental de China, en diciembre de 2019, en la que hablaron de la situación de la sociedad civil y de asuntos de actualidad en China.
Ese mismo mes, la policía empezó a citar o a detener en todo el país a personas que asistieron a la reunión de Xiamen.
Torturados en una “silla tigre”
Tras ser detenido el 26 de diciembre de 2019, Ding estuvo más de un año incomunicado en “vigilancia domiciliaria en un lugar designado”.
Según amistades de Xu Zhiyong, éste se ocultó tras la reunión de diciembre de 2019. A comienzos de febrero de 2020, Xu criticó la gestión del presidente Xi Jinping de la crisis del coronavirus y de las protestas de Hong Kong en favor de la democracia, y pidió que dimitiera.
El 15 de febrero de 2020, Xu fue detenido en el domicilio de otro activista donde se hospedaba y estuvo asimismo incomunicado en “vigilancia domiciliaria en un lugar designado” hasta el 21 de enero de 2021.
Ambos fueron sometidos a tortura y otros malos tratos durante la reclusión, que incluyeron horas de interrogatorio y permanecer muchos días atados a una “silla tigre” de hierro con las extremidades retorcidas más de 10 horas al día.
Este trato vulnera la prohibición absoluta de la tortura y otros malos tratos prevista en el derecho internacional de los derechos humanos.
Las autoridades investigaron sus casos conjuntamente hasta el 20 de enero de 2021, después de lo cual fueron acusados de “subversión del poder del Estado” y se informó a sus abogados de que cada caso se trataría por separado.
“La valentía de estos hombres en la defensa de los derechos humanos de otras personas debe ser elogiada, no castigada. Xu siguió defendiendo enérgicamente a grupos desfavorecidos incluso después de ser encarcelado por ese motivo, y denunció la gestión por el gobierno de la COVID-19 cuando otros guardaban silencio”, dijo Gwen Lee.
“El gobierno chino usa sistemáticamente cargos de seguridad nacional con disposiciones muy poco precisas, como ‘subvertir el poder del Estado’, para procesar injustamente a profesionales de la abogacía, intelectuales, periodistas, activistas de derechos humanos y personas que trabajan en ONG, entre otras”.
El abogado de Xu no pudo verlo durante tres meses antes la vista preliminar de la semana pasada, ni se le permitió obtener información y documentos relacionados con el caso, algunos de los cuales podrían incluir “pruebas” obtenidas bajo tortura.
Por su parte, el abogado de Ding no ha tenido contacto con éste desde hace cuatro meses.
“Xu Zhiyong y Ding Jiaxi están en el punto de mira sólo por ejercer pacíficamente su derecho a la libertad de opinión y de asociación, y deben ser puestos en libertad de inmediato”, concluyó Gwen Lee.
“Mientras tanto, las autoridades deben asegurarse de que Xu y Ding no son sometidos a nuevas torturas u otros malos tratos en prisión, y permitirles ver a sus familias y a profesionales de la abogacía de su elección”.
Esta no es la primera vez que Xu y Ding son encarcelados por su activismo pacífico.
Xu pasó cuatro años en prisión —desde 2013 hasta 2017— por cargos falsos de orden público.
Ding, cuyo activismo incluye la defensa de los derechos de los hijos e hijas de las personas trabajadoras migrantes y exigir una gobernanza transparente, fue condenado a tres años y medio de prisión en 2014 por “reunir una multitud para perturbar el orden en un lugar público”.
Por otra parte, no se han confirmado aún las fechas del juicio de
Li Qiaochu, feminista y activista en favor de los derechos laborales, pareja de Xu Zhiyong, que estuvo en detención secreta desde febrero hasta junio de 2020. Las autoridades volvieron a detener a Li el 6 de febrero de 2021 y fue recluida en el mismo centro de detención que Xu Zhiyong y Ding Jiaxi, acusada de “incitar a la subversión del poder del Estado”.
Las autoridades no permitieron que Li se entrevistara con su abogado hasta agosto de 2021. El acta de acusación formal de Li, fechada el 28 de febrero de 2022, dice que Xu Zhiyong ordenó a Li publicar artículos “subversivos” en Internet en septiembre de 2019.