El 10 de septiembre Jani Silva, presidenta de la asociación ADISPA, que gestiona una zona de reserva campesina en la Amazonía de Colombia (departamento de Putumayo), y defensora de la tierra, el territorio y el medio ambiente, fue amenazada por medio de una llamada telefónica diciéndole “la vamos a volar con todo y camioneta”. Jani y ADISPA cuentan con medidas de protección de la Unidad Nacional de Protección (UNP) del gobierno. Las amenazas hacen una referencia directa a atacarla dentro de los carros de protección, posiblemente con explosivos, para acabar con su vida. Pedimos a las autoridades colombianas que hagan frente a estas amenazas, llevando a cabo investigaciones sólidas y efectivas para identificar a las personas responsables y llevarlas ante la justicia, con garantías de debido proceso, así como proporcionando protección oportuna e integral a la defensora y su comunidad, abordando las causas estructurales de la violencia que enfrentan.

 

ACTÚEN: REDACTEN SU PROPIO LLAMADO O UTILICEN ESTA CARTA MODELO

 

Luz Adriana Camargo

Fiscal General de la Nación

Avenida Calle 24 No. 52 – 01 

Bogotá DC, Colombia

E-mail: despacho.fiscal@fiscalia.gov.co

X: @FiscaliaCol

 

Estimada señora Fiscal General, 

 

Me dirijo a usted para expresarle mi profunda preocupación por la seguridad de los defensores y defensoras de los derechos humanos y las personas defensoras del territorio, la tierra y el medioambiente en Colombia, en particular, de Jani Silva, presidenta de la Asociación de Desarrollo Integral Sostenible de la Perla Amazónica (ADISPA), una organización comunitaria que gestiona la Zona de Reserva Campesina de La Perla Amazónica en el municipio de Puerto Asís (Putumayo, Colombia). 

Amnistía Internacional ha registrado amenazas, actos de estigmatización y hostigamientos recurrentes en contra de Jani Silva y ADISPA desde por lo menos 2017, y cómo esto ha afectado su trabajo de defensa de los derechos de su comunidad y su dedicación a la conservación y vigilancia de la biodiversidad y el agua en su territorio. La Comisión Intereclesial de Justicia y Paz denunció que el 10 de septiembre Jani Silva recibió una llamada en la que amenazaron con atentar contra su vida, haciendo referencia explícita a que la atacarían dentro de uno de los vehículos del esquema de protección que el gobierno, a través de la Unidad Nacional de Protección (UNP), le tiene asignado a ADISPA. Adicionalmente, en la tarde del mismo día, hombres sospechosos merodearon la casa de Jani Silva y la oficina de ADISPA en el centro poblado de Puerto Asís. 

Nos preocupa profundamente ver que grupos armados presentes en esta región del país amenazan directamente a las organizaciones de la sociedad civil y las estigmatizan como colaboradoras con otros grupos delictivos de la zona. La insto a que actúe con la mayor diligencia con miras al cumplimiento efectivo del deber de la Fiscalía General de la Nación de investigar las amenazas y ataques contra Jani Silva y miembros de ADISPA, y a determinar quiénes son los responsables de ordenar y perpetrar estos ataques y llevarlos ante la justicia, con garantías de debido proceso, para prevenir así nuevas agresiones contra personas que defienden los derechos humanos en la región del Bajo Putumayo.

Atentamente, 

[NOMBRE]

informaCión Adicional

 

El Putumayo se encuentra al sur de Colombia, en la frontera con Ecuador. Comprende el piedemonte de la cordillera de los Andes y se adentra más de 300 km en la selva amazónica, por lo que cuenta con una gran riqueza de agua, biodiversidad y recursos naturales. Al mismo tiempo, según la Oficina de las Naciones Unidas para la Droga y el Delito, el Putumayo (especialmente sobre la frontera con Ecuador) es un enclave de producción de hoja de coca, alcanzando más de 48.000 hectáreas de cultivos en 2022, una quinta parte de toda la coca cultivada en Colombia ese año.

En este contexto, en los últimos años se ha desencadenado una fuerte disputa por el control de la economía de la coca entre los grupos armados conocidos como Comandos de la Frontera y el Frente Carolina Ramírez, afiliados respectivamente a estructuras armadas más amplias, conocidas como la Segunda Marquetalia y el Estado Mayor Central. Ambos grupos sostienen hoy diálogos con el gobierno de Gustavo Petro en el marco de su política de Paz Total. Aunque la región registró un periodo de relativa calma en 2023, la confrontación entre los dos grupos armados se volvió a tensionar desde finales de ese año, y la presión sobre las organizaciones de la sociedad civil, atrapadas entre los dos bandos en disputa, retornó.

Ejemplo de las organizaciones y comunidades atrapadas en medio de este contexto de conflicto es la Asociación de Desarrollo Integral Sostenible de La Perla Amazónica – ADISPA, creada a finales de los 2000 para gestionar la Zona de Reserva Campesina de La Perla Amazónica. Las Zonas de Reserva Campesina (ZRC) son una figura territorial creada a mediados de los años 90 para reconocer los derechos colectivos de comunidades campesinas, así como sus prácticas de producción sostenibles con el medio ambiente. La defensa de la comunidad campesina y sus prácticas sostenibles en el territorio de la ZRC han hecho que ADISPA, y Jani Silva al frente de ella, choquen con actores interesados en dar otros usos económicos a la región, incluyendo a los grupos armados allí presentes. Este es el contexto de los ataques que Jani Silva viene sufriendo en los últimos años.

Amnistía Internacional ha emitido dos acciones urgentes en abril y en julio 2020, y una más en febrero 2021, pidiéndole al Ministerio del Interior, y a la Unidad Nacional de Protección (UNP), dependiente de ese ministerio, que tomaran medidas eficaces de protección para la vida de Jani Silva, después de graves hechos de amenazas en contra de ella. A finales de ese mismo año, más de 415.000 personas enviaron mensajes de apoyo a Jani Silva en el marco de la campaña Escribe por los Derechos. Hoy, Jani Silva cuenta con un esquema de protección individual de la UNP, y ADISPA cuenta con un esquema colectivo de la misma entidad gubernamental. No obstante, Amnistía Internacional ha señalado que estos esquemas no son completamente adecuados al contexto y las necesidades de Jani Silva, ADISPA y su trabajo y presentan fallas recurrentemente. Las amenazas en contra de Jani Silva han afectado seriamente su vida y sus condiciones de trabajo al frente de ADISPA, impactando a la comunidad de la Zona de Reserva Campesina de La Perla Amazónica.

El 13 de septiembre, la Comisión Intereclesial de Justicia y Paz denunció los hechos de los que había sido víctima Jani Silva esa semana.

 

PREFERRED LANGUAGE TO ADDRESS TARGET: Español. También pueden escribir en su propio idioma.

 

PLEASE TAKE ACTION AS SOON AS POSSIBLE UNTIL: 17 de diciembre de 2024

 

NAME: Jani Silva (femenino)
PREVIOUS UA: https://www.amnesty.org/es/documents/amr23/3690/2021/es/

Publicado el 1 de octubre de 2024