El Consejo está integrado por 47 Estados miembros de las Naciones Unidas, entre ellos Argentina. Su tarea consiste en fortalecer la promoción y protección de los derechos humanos en todo el mundo, abordando situaciones de violaciones de derechos humanos y formulando recomendaciones al respecto. El período 55º es el primero de los tres períodos de sesiones ordinarias que tendrán lugar en 2024.
Como suele ser habitual al inicio de cada período de sesiones, Amnistía Internacional remitió una carta a las autoridades de la Cancillería Argentina con sus prioridades y recomendaciones. La organización apunta a que Argentina se asegure defender los más altos estándares de derechos humanos a nivel internacional.
Prioridades de Amnistía Internacional para el CDH55
- Renovar el mandato de la Comisión de Investigación sobre Ucrania, para mantener la atención tanto en la rendición de cuentas como en el impacto de la agresión rusa en las personas marginadas y vulnerables, incluidos niños y niñas, como se documenta en este informe; https://www.amnesty.org/en/documents/eur50/7508/2023/en/
- Renovar el mandato del Relator Especial y la Misión de Investigación sobre Irán, para garantizar que el Consejo siga centrado de lleno en la situación de los derechos humanos en el contexto de una impunidad de larga data y la utilización de la pena de muerte y la violencia sexual como armas en un intento de someter al movimiento 'Mujer, Vida, Libertad';
- Dar respuesta a la crisis en Israel y los Territorios Palestinos Ocupados (TPO). En este sentido, la organización llama a todos los Estados a utilizar debates, negociaciones y eventos para:
- apoyar los mandatos de la Comisión de Investigación sobre Israel y los TPO y el Relator Especial sobre los TPO, e insistir en su acceso a áreas dentro del alcance de sus mandatos;
- apoyar un alto el fuego inmediato del conflicto y un embargo integral de armas a todas las partes en el conflicto en Gaza e Israel;
- apoyar la liberación inmediata e incondicional de todas las personas cautivas en manos de Hamás y otros grupos armados y de todas las personas detenidas de forma ilegal en cárceles israelíes.
- insistir en una mayor provisión de asistencia humanitaria urgente, financiación de la Agencia de Naciones Unidas para los Refugiados de Palestina en Oriente Próximo y respeto e implementación de las órdenes de la Corte Internacional de Justicia.
- Renovar el mandato sobre Bielorrusia, para facilitar un proceso de rendición de cuentas por violaciones y crímenes documentados por el examen de la Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos (ACNUDH), incluidos posibles crímenes contra la humanidad;
- Renovar el mandato del Relator Especial sobre Myanmar, para continuar contribuyendo a mitigar las graves violaciones a los derechos humanos que se han incrementado significativamente desde el golpe de Estado militar de febrero de 2021. Esta escalada incluye diversos crímenes, como el castigo colectivo por medio de ataques aéreos y terrestres generalizados, detenciones arbitrarias, tortura, ejecuciones extrajudiciales y saqueo e incendio sistemáticos de poblaciones.
- Renovar el mandato de la Comisión de Derechos Humanos de Sudán del Sur, para mantener el escrutinio durante un momento crítico para el futuro del país, en el que se registran violaciones de los derechos humanos y abusos por parte de las fuerzas armadas, las milicias y las instituciones del Estado y donde los medios de comunicación y los grupos de la sociedad civil operan en condiciones sumamente adversas;
- Renovar los mandatos temáticos de los procedimientos especiales sobre el medio ambiente saludable y sostenible, los derechos culturales, las personas con albinismo y el derecho a la privacidad. Y seguir los procedimientos establecidos en el nombramiento de nuevos titulares de mandatos.
Información complementaria
Amnistía Internacional también da la bienvenida a debates sobre situaciones temáticas importantes y específicas de países, incluyendo Afganistán, República Democrática del Congo, Eritrea, Guatemala, Haití, Honduras, Sri Lanka, Ucrania y Venezuela, así como sobre el derecho a una vivienda adecuada, sobre la libertad de reunión y de asociación (incluida la presentación de herramientas para que los organismos encargados de hacer cumplir la ley promuevan y protejan los derechos humanos en el contexto de protestas pacíficas) y sobre los defensores/as de los derechos humanos (incluido el informe sobre los defensores de los derechos humanos de jóvenes y niños). Además de los resultados del Examen Periódico Universal de Turkmenistán, Burkina Faso, Cabo Verde, Colombia, Uzbekistán, Tuvalu, Alemania, Djibouti, Canadá, Bangladesh, la Federación de Rusia, Azerbaiyán, Camerún y Cuba.
Todos los Estados miembros y observadores del Consejo tienen la responsabilidad de garantizar que el Consejo cumpla su mandato de prevenir violaciones de derechos humanos y responder a emergencias de derechos humanos. En este sentido, Amnistía Internacional insta a los Estados a tomar medidas significativas para abordar las acuciantes crisis de derechos humanos que hasta ahora han eludido o han abandonado la consideración formal, a pesar de informes creíbles sobre patrones de violaciones graves de derechos humanos y la posible comisión de crímenes internacionales. En este sentido, la organización solicita que los Estados continúen destacando las preocupaciones sobre Etiopía en los debates relevantes y reinstale la situación de este país en la agenda del Consejo, como así también que den seguimiento a la evaluación de 2022 del ACNUDH sobre Xinjiang y aborden la situación en China. Finalmente, el Consejo también debe abordar directamente las crisis en Libia, Yemen y Arabia Saudita.
Obstáculos y desafíos para la democratización del debate
Por otro lado, y de cara a la Cumbre del Futuro, se observan acontecimientos que contrastan con las ambiciones colectivas de un sistema internacional de derechos humanos eficaz e inclusivo. Entre ellos se encuentran:
- la interrupción de las modalidades híbridas y online para la participación en eventos de la ONU (ver carta conjunta de la sociedad civil: https://ishr.ch/latest-updates/joint-civil-society-letter-calling-to-ensure-live-online-modalities-of-participation-for-un-human-rights-bodies-and-mechanisms/)
- la regresión en cuanto al acceso a los espacios de la ONU para miembros de la sociedad civil (incluidos requisitos de acceso adicionales y onerosos para miembros de la sociedad civil que tengan credenciales permanentes); y
- una crisis de liquidez en la ONU que está impidiendo la implementación plena y efectiva de mandatos cruciales de derechos humanos.
Estos retrocesos afectarán a la capacidad de actores clave para colaborar de forma significativa y contribuir a que los esfuerzos colectivos se implementen. Amnistía Internacional insta a los Estados a garantizar que Ginebra siga siendo un ejemplo de acceso mejorado de la sociedad civil a los espacios de la ONU, incluido el acceso híbrido, remoto y físico. En consecuencia, resulta prioritario que todos los Estados que aún no lo han hecho paguen las cuotas en su totalidad.