Ante la inauguración hoy en San José (Costa Rica) de la RightsCon, una cumbre sobre derechos humanos en la era digital, Rasha Abdul Rahim, directora de Amnesty Tech, ha declarado:
“La crisis de los programas espía tiene inmensas consecuencia para el futuro de los derechos humanos, y es hora de que el mundo haga algo más que poner parches a esta intromisión digital generalizada y encubierta en la vida de las personas. Debe haber una prohibición global inmediata del software espía altamente invasivo.
“Los gobiernos de todo el mundo deben tomar medidas para impedir que empresas de software espía sin escrúpulos vendan sus productos y que los teléfonos se conviertan en armas. Es un hecho que este tipo de software supone un peligro real para la privacidad y la seguridad de cualquier persona.
El software espía altamente invasivo se ha convertido en el arma preferida de los gobiernos que tratan de silenciar a periodistas, atacar a activistas y reprimir la disidencia, poniendo innumerables vidas en peligro. Debe ser ilegalizado ya.”
El Laboratorio sobre Seguridad de Amnistía Internacional monitorea e investiga activamente a empresas y gobiernos que propagan y hacen un uso indebido de tecnologías de cibervigilancia que suponen una grave amenaza para defensores y defensoras de los derechos humanos, periodistas y la sociedad civil. Las investigaciones que está llevando a cabo, por ejemplo, siguen revelando la implacable propagación del software espía Pegasus de NSO Group, que ha sido utilizado contra jefes de Estado, activistas y periodistas en España, Polonia, República Dominicana y en toda Latinoamérica, Oriente Medio y África. La lista continúa y es cada vez más larga.
El presidente estadounidense Biden tomó en marzo una primera medida significativa para abordar la crisis de programas espía al firmar una orden ejecutiva que limita el uso por el gobierno estadounidense de tecnología de software espía comercial. El gobierno estadounidense y los gobiernos de todo el mundo deben ir más allá y prohibir el software espía altamente invasivo.
Amnistía Internacional define el ‘software espía altamente invasivo’, del que Pegasus es sólo un ejemplo, como aquellos programas cuya funcionalidad no puede limitarse y cuyo uso no puede ser examinado de forma independiente. La organización también pide la prohibición temporal mundial del uso de los programas espía que pueden ser limitados y examinados de manera independiente hasta que se disponga de un sistema de salvaguardias de derechos humanos para evitar abusos.
Amnistía Internacional en la RightsCon
En Amnistía Internacional creemos que para la tecnología lo primero deben ser las personas y los derechos humanos, y hemos incorporado a nuestro equipo a hackers, programadores/as, científicos/as de datos y técnicos/as para contribuir a que así sea. Investigamos. Hacemos campaña. Trabajamos para cambiar políticas. Luchamos por la justicia. Exigimos rendición de cuentas a la gente poderosa. Marcamos la agenda para el futuro de la tecnología y los derechos humanos.
El Security Lab sigue monitoreando y denunciando nuevas empresas de software espía, contribuyendo con ello a proteger a la población civil y a miles de millones de dispositivos móviles de estos ataques invasivos. Herramientas únicas de peritaje forense, como el kit de herramientas de verificación móvil (MVT), desarrolladas por el Security Lab, están potenciando un campo incipiente en el que técnicos y técnicas de la sociedad civil trabajan para proteger a sus propias comunidades de estas amenazas.
Todos los años, la RightsCon reúne a activistas, dirigentes empresariales, responsables de políticas, tecnólogos/as y periodistas de todo el mundo para actuar en defensa de los derechos humanos en la era digital. Tras las últimas tres ediciones virtuales, la edición número 12 tendrá un carácter mixto, pues se celebrará online y en San José (Costa Rica), entre el 5 y el 8 de junio de 2023.
Hagan clic aquí para ver las sesiones de Amnesty Tech en la RightsCon.