En respuesta a la muerte de Chow Tsz-lok, manifestante estudiantil que cayó de un edificio de aparcamiento el 4 de noviembre cuando huía, según los informes, de los enfrentamientos con la policía, Man-Kei Tam, director de Amnistía Internacional Hong Kong, manifestó:
“Tiene que realizarse una investigación urgente sobre los sucesos que condujeron a la caída de Chow Tsz-lok, incluido el presunto retraso causado por los agentes al personal de ambulancia que intentaba llegar hasta él.
“El hecho de que, según la información disponible, Chow Tsz-lok estuviera huyendo del gas lacrimógeno cuando cayó demuestra los peligros del uso indiscriminado del gas y subraya la necesidad de que la policía de Hong Kong actúe con moderación e intente reducir los enfrentamientos con quienes participan en las manifestaciones.
“En las últimas semanas, las autoridades de Hong Kong se han arrogado amplios poderes para sofocar las protestas y se han acogido a la Normativa de Excepción para prohibir cubrirse el rosto en las reuniones públicas. Las tácticas empleadas por la policía de Hong Kong son cada vez más alarmantes y parecen caracterizarse por la sed de venganza.
“Hay poca confianza en los mecanismos internos de investigación. Por eso pedimos que se lleve a cabo una investigación independiente e imparcial sobre la muerte de Chow Tsz-lok, así como sobre todos los casos de uso excesivo de la fuerza contra manifestantes durante las protestas contra el proyecto de Ley de Reforma de la Ley de Extradición, y que se inicien procesamientos para garantizar justicia y reparación.”