“El gobierno de Trump está desafiando al derecho internacional y provocando una crisis en la frontera, al proponer políticas que causarían daños catastróficos irreparables a miles de familias que no tuvieron otra opción que abandonar sus hogares por la seguridad de sus hijos e hijas”.
“El presidente Trump ha demostrado su desconsideración despiadada por los problemas de quienes emprenden ese peligroso viaje desde Honduras y otros países centroamericanos. Su gobierno debe desistir de su campaña deliberada de violaciones de derechos humanos contra personas que buscan seguridad y reconocer inmediatamente que todas las personas tienen derecho a solicitar protección, tanto según la legislación estadounidense como según el derecho internacional.”
Margaret Huang, directora ejecutiva de Amnistía Internacional Estados Unidos, añadió:
“Prohibir a ciertas personas solicitar asilo constituiría una violación directa de la legislación nacional y del derecho internacional, además de poner vidas en peligro. Sería la culminación de años de políticas de odio que criminalizan a las familias que piden protección y devolvería a una situación de riesgo a personas desesperadas”.
“Las personas cuyas vidas pone en peligro esta propuesta extremadamente cruel simplemente no suponen ninguna amenaza para la seguridad nacional. Son personas como usted y yo, excepto que muchas de ellas se han visto obligadas a huir para salvar sus vidas de la violencia y la persecución. Lo único que piden es una oportunidad de ponerse a salvo. Merecen nuestra compasión, no nuestro desprecio.”
Ayer, una delegación de Amnistía Internacional visitó un campamento de emergencia que ha dado refugio a miles de niños y niñas inmigrantes en Tornillo, Texas, entre ellos varios solicitantes de asilo. Esta semana, Amnistía Internacional también envió una delegación para observar a la caravana de solicitantes de asilo en la frontera entre México y Guatemala y documentar la respuesta de las autoridades de ambos países.
“Lo que constatamos en el campamento de emergencia de Tornillo simplemente resalta la enorme tragedia que ya se ha producido en Estados Unidos”, afirmó Huang, que formó parte de esa delegación. “Las autoridades estadounidenses deben actuar de inmediato para acelerar la puesta en libertad de más de 1100 niños y niñas que permanecen detenidos allí desde hace más tiempo del legalmente permitido. No podemos seguir fallándoles al permitir que estas propuestas peligrosas pasen a ser políticas.”
Estas visitas se producen unas semanas después de la publicación del nuevo informe de Amnistía Internacional que reveló las graves consecuencias humanas de los reenvíos forzados ilegales que el gobierno de Trump ha implementado en la frontera, y que el número de familias separadas en esa frontera es mucho mayor de lo que se había admitido hasta entonces.
Además, Amnistía Internacional está movilizando a sus millones de socios y simpatizantes en todo el mundo para que actúen, entre otras cosas mediante reacciones online a las declaraciones públicas sobre normas propuestas para permitir la retención indefinida de niños y niñas en lugar de alojarlos con familiares y familias de acogida en Estados Unidos.