El CDH está integrado por 47 Estados miembros de las Naciones Unidas, entre ellos Argentina, y se reúne en períodos ordinarios de sesiones tres veces al año en Ginebra, Suiza. Durante estos encuentros, el Consejo debate, analiza, y toma decisiones sobre una amplia variedad de temas relacionados con los derechos humanos en el mundo.
Como en cada período de sesiones, Amnistía Internacional envió sus prioridades a los Estados, participó y dio seguimiento a la sesión. A continuación, se detallan los principales asuntos y resultados alcanzados:
Israel/Territorios Palestinos Ocupados: Luego de años de que Amnistía abogue para que se aborde el problema de la no-implementación o sub-implementación de la base de datos de actividades económicas en los asentamientos israelíes (la cual fue creada en 2016), el CDH ha aprobado una resolución destinada a la financiación e implementación completa de dicha actividad. Esperamos que esta resolución pueda revitalizar la iniciativa de la base de datos como herramienta efectiva para promover el cumplimiento del derecho internacional y como ejemplo positivo para situaciones semejantes en el resto del mundo. Cabe destacar que una clara mayoría de estados votó a favor de la resolución, lo que hizo que se aprobara cómodamente a pesar del voto en contra de Estados Unidos, Reino Unido y República Checa.
Myanmar/Rohinyá y otras minorías: El CDH adoptó por consenso una resolución presentada por la Organización para la Cooperación Islámica (OCI) titulada “Situación de los derechos humanos de los musulmanes Rohingya y otras minorías en Myanmmar”. Esta es una resolución habitual presentada todos los meses de junio por la OCI. Los borradores originales presentados en las negociaciones favorecían la repatriación de los refugiados Rohingya y revertían la preocupación expresada en resoluciones previas sobre la ausencia de condiciones para el retorno seguro y voluntario de los refugiados. Amnistía se opuso enfáticamente a estos planteos. La version revisada de la resolución que fue adoptada contiene lenguaje mejorado sobre este punto. Asimismo, la resolución mandata al Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos (ACNUDH) a presentar una actualización oral en la sesión 58 del Consejo continuada por un informe en la sesión 59, seguidos ambos por un diálogo interactivo. En líneas generales y al igual que en el pasado, la resolución fue débil en su capacidad para abordar las graves preocupaciones que existen sobre la situación en Myanmar vinculadas a los Rohngya y a otras minorías.
Ucrania: El CDH extendió el apoyo técnico y la construcción de capacidades del Oficina del ACNUDH para Ucrania. Inusualmente para una resolución presentada por el país involucrado, esta resolución ha sido siempre votada a favor, siendo en esta sesión adoptada con 28 votos a favor, 3 en contra y 16 abstenciones. Estas cifras de apoyo superan a las que se habían registrado la última vez que la resolución había sido adoptada (Camerún y Bolivia pasaron del voto en contra a la abstención, y Argentina, Costa de Marfil, Gabón y Somalía votaron esta vez a favor cuando antes se habían abstenido). Ucrania presentó una renovación técnica considerable, sin adiciones sustantivas, y la resolución asegura que el ACNUDH pueda continuar realizando actualizaciones trimestrales al CDH sobre la situación.
Colombia: se adoptó una resolución para proveer asistencia técnica a Colombia. La resolución fue presentada por dicho país y prevee la provision de recursos adicionales para el trabajo del ACNUDH en Colombia. Se proyecta que un experto designado por el ACNUDH se encargue de identificar y verificar los obstáculos de la implementación del acuerdo de paz de 2016 y sus consecuencias para los derechos humanos. Tanto la ACNUDH como el experto designado deberán presentar informes en próximas sesiones del CDH, a las cuales seguirán respectivos diálogos interactivos. La resolución fue adoptada con 28 votos a favor, 19 abstenciones (todas de estados miembros de la OCI, que se opusieron a referencias sobre orientación sexual e identidad de género en el texto de la resolución) y ningún voto en contra.
Tecnología digital: El Consejo adoptó por consenso una resolución sobre tecnología digital nueva y emergente, focalizada en inteligencia artificial y presentada por un grupo principal de países que incluyó a Austria, Brasil, Dinamarca, Marruecos, Corea del Sur y Singapur. La resolución aborda débilmente los aspectos regulatorios y vinculados a la discriminación, además de haberse excluido referencias a la vigilancia en la version de la resolución finalmente adoptada. El texto final mandata a la ACNUDH a realizar un informe que mapee los estandares existentes e indentifique brechas y desafíos y la convoca a proveer guía y asistencia a los estados y las reparticiones de la ONU.
Violencia contra mujeres y niñas: El CDH adoptó una resolución sobre la violencia contra mujeres y niñas en contextos de detención por la justicia criminal presentada por Canadá. La misma incluyó lenguaje positivo sobre elementos de justicia criminal vinculados a medidas sobre la custodia y la detención previa al juicio, algunos de los cuales fueron provistos por Amnistía. La resolución mandató a la ACNUDH a preparar un informe sobre la situación de los derechos humanos de niñas y mujeres detenidas por la justicia criminal, incluyendo medidas y prácticas para prevenir y abordar situaciones de violencia y buenas practicas y desafíos vinculadas a políticas y programas de rehabilitación y reintegración. El mismo será presentado en la sesión 59 del Consejo.
Espacio para la sociedad civil: la resolución del Consejo sobre el espacio de acción para la sociedad civil incluyó un nuevo lenguaje sobre prevención a las violaciones de los derechos humanos y sobre modalidades híbridas para la participación de las organizaciones de la sociedad civil en encuentros en Naciones Unidas, además de recuperar conceptos de viejas versiones sobre acreditación. Amnistía había bregado por estas cuestiones y en esta oportunidad impulsó la inclusión de lenguaje vinculado a las restricciones de visado y de pleitos estratégicos contra la participación pública, a pesar de lo cual no fueron incluidos en la version final de la resolución. Amnistía continuará estableciendo estrategias con socios para hacer que esta resolución sea más significativa y más efectiva para la sociedad civil en el futuro.
Migraciones: el CDH adoptó por consenso una resolución sobre derechos humanos de los migrantes. La misma incluyó lenguaje positivo acerca del alcance cuantitativo y cualitativo de la problemática y resaltó la vinculación entre violaciones a los derechos humanos de los migrantes y racismo. No fue posible incorporar un mecanismo internacional de investigación como lo solicitaba Aministía, a pesar de lo cual se convino establecer un panel de discusión entre sesiones. Amnistía planea mantener la campaña por el establecimiento de un monitoreo global y mecanismos de rendición de cuentas.
Odio religioso: el Consejo sostuvo un debate urgente sobre odio religioso el día 11 de julio, a pedido de los estados de la OCI a raiz del indicidente de la quema del Corán en Suecia. La OIC presentó una resolución (titulada “Contrarrestando el odio religioso constitutivo de la discriminación, la hostilidad y la violencia”) que fue aprobada con 28 votos a favor, 12 votos en contra y 7 abstenciones. El texto inicial despertó preocupación en varias organizaciones de la sociedad civil y estados sobre su intento de igualar automáticamente la profanación de textos sagrados y símbolos religiosos con la incitación al odio, sin referencia al contexto de tales actos y a las condiciones relevantes estipuladas en el Plan de Acción de Rabat para abordar tales instancias. El texto atravesó revisiones que modificaron ligeramente el lenguaje que ahora sugiere que la incitación al odio es un resultado posible y no necesariamente automático del mismo. Asimismo, la resolución constituye un panel de discusión para la sesión 55 sobre los factores, causas e impactos en los derechos humanos de la profanación de los textos sagrados, edificios de culto y símbolos religiosos y mandata al ACNUDH a presentar un informe sobre el panel de discusión en la sesión 56.
Desarrollo: se adoptó una resolución presentada por China sobre la contribución del desarrollo al goce de los derechos humanos. La votación arrojó un resultado de 30 votos a favor, 12 votos en contra y 5 abstenciones. Diversas organizaciones de la sociedad civil y estados expresaron preocupación por el encuadre que hace el texto de los derechos humanos como interdependientes con el desarrollo y por la falta de foco en los derechos individuales.
Libertad de asociación y reunión pacífica: Amnistía se involucró en un diálogo interactivo con el Relator Especial sobre los derechos de asociación y reunión pacífica. Dicho diálogo abordó la cuestión de la rendición de cuentas que deben ejercer las autoridades en relación con el comercio de equipos que las fuerzas policiales usan para hacer cumplir la ley. Durante esta interacción, el Relator Especial apoyó el establecimiento de un marco normativo vinculante sobre el material para hacer cumplir la ley.
Otros temas tratados:
Se aprobaron resoluciones sobre Eritrea y Bielorruisa, extendiendo los mandatos de sendos Relatores Especiales y expresando preocupación por las graves violaciones a los derechos humanos en ambos paises. También se renovó el mandato del Relator Especial sobre Extrema Pobreza, tema sobre el cual Aministía pudo mantener y actualizar un importante párrafo vinculado al persistente impacto de la pandemia por COVID. Por ultimo, el Consejo adoptó por consenso una resolución sobre el impacto negativo de la corrupción en el disfrute de los derechos humanos, presentado por un un grupo central de países que incluyó a Marruecos, Argentina, Austria, Brasil, Etiopía, Indonesia, Polonia y Reino Unido.
