Ante el intento del gobierno de Hong Kong de pedir una orden judicial para prohibir a la población que cante, retransmita o distribuya la canción de protesta “Gloria a Hong Kong”, la directora del Equipo de China de Amnistía Internacional, Sarah Brooks, ha declarado:
“La absurda campaña del gobierno de Hong Kong de prohibir una canción muestra su escaso respeto hacia los derechos humanos.
“Prohibir ‘Gloria a Hong Kong’ sería una clara vulneración del derecho y las normas internacionales de derechos humanos a pesar de que el gobierno afirma, falsamente, que la medida sería compatible con la Carta de Derechos de Hong Kong y los tratados internacionales de derechos humanos vinculantes para el territorio.
“Preocupa además que el gobierno haya intentado justificar la solicitud de prohibición remitiéndose a una Ley de Seguridad Nacional enormemente problemática. Las normas internacionales de derechos humanos prohíben castigar la expresión por motivos de seguridad nacional salvo que las autoridades demuestren una intención de ‘incitar a actos de violencia inminentes’. Es evidente que cantar, retransmitir o distribuir ‘Gloria a Hong Kong’ —sea en una escuela, en la calle, en un centro comercial o como himno en un estadio deportivo— no cumple este requisito.
“El gobierno de Hong Kong debe poner fin a esta acérrima represión de la libertad de expresión. Una canción no es una amenaza para la seguridad nacional, y ésta no puede usarse como excusa para negar a las personas el derecho a expresar opiniones políticas diferentes.”
Información complementaria
El Departamento de Justicia de Hong Kong declaró el martes 6 de junio su intención de prohibir “la retransmisión, interpretación, impresión, publicación, venta, oferta de venta, distribución, difusión, exhibición o reproducción de cualquier tipo” de la canción “Gloria a Hong Kong”, que adquirió especial relevancia durante las protestas multitudinarias de 2019 en la ciudad.
También se prohibirían la letra y la melodía de la canción. Una consigna de protesta que también aparece en la canción —“Liberemos Hong Kong, revolución de nuestra época”— ya está prohibida en aplicación de la Ley de Seguridad Nacional por considerarla un llamamiento a la “secesión”.
El martes, el gobierno declaró que las personas que tengan relación con la canción en cualquiera de las formas descritas podrían ser enjuiciadas en aplicación de una ley sobre “sedición” de la era colonial o acusadas de “secesión” en aplicación de la Ley de Seguridad Nacional, en cuyo caso podrían ser condenadas a cadena perpetua. Desde 2020, el gobierno viene empleando de forma creciente el cargo demasiado amplio de “sedición” para reprimir la expresión legítima.
“Gloria a Hong Kong” se ha interpretado en lugar del himno nacional de Hong Kong en algunos eventos deportivos recientes en los que participaban equipos o atletas que representaban al territorio. El himno nacional de Hong Kong es el himno nacional de China, “Marcha de los voluntarios y voluntarias”.
Especialistas independientes de derechos humanos han expresado en reiteradas ocasiones su preocupación por las amplias definiciones contenidas en la Ley de Seguridad Nacional de Hong Kong y su aplicación arbitraria.
Por su parte, el Comité de Derechos Humanos de la ONU, en su análisis de julio de 2022 de la aplicación por Hong Kong del Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos, tratado de derechos humanos de la ONU vinculante para Hong Kong, señaló las restricciones indebidas de toda una serie de derechos que facilitaba la Ley de Seguridad Nacional y recomendó la derogación de ésta y de las disposiciones sobre sedición contenidas en la Normativa Penal.
Según las normas internacionales de derechos humanos, ni la defensa pacífica de un cambio de gobierno o de la política de éste, ni las críticas e incluso insultos a instituciones del Estado o a sus símbolos deben prohibirse por motivos de seguridad nacional.