En respuesta a la pena de 14 meses de prisión impuesta al ciudadano hongkonés Chu Kai-pong por llevar una camiseta y una máscara “sediciosas”, Sarah Brooks, directora de Amnistía Internacional para China, ha declarado:
“Cuando ya pensábamos que la situación de los derechos humanos en Hong Kong no podía ser más desalentadora, condenan a un hombre a más de un año de prisión sólo por la ropa que decidió vestir. Se trata de un ataque flagrante contra el derecho a la libertad de expresión”.
“La declaración de culpabilidad y condena de Chu Kai-pong por su elección de vestimenta también pone de relieve la perversidad absoluta de la nueva Ley del Artículo 23, de Hong Kong, que amplía las competencias del gobierno para sancionar los llamados actos ‘sediciosos’.”
“Chu Kai-pong es la primera persona condenada en aplicación de esta ley, pero la redacción poco precisa, el amplio ámbito de aplicación y el carácter represivo del texto legislativo hacen temer a la población hongkonesa que no sea la última. Instamos una vez más a las autoridades de Hong Kong a que deroguen esta ley.”
“El gobierno también debe poner fin al uso de la legislación sobre la ‘sedición’ para reprimir la disidencia con el pretexto de proteger la ‘seguridad nacional’. Chu Kai-pong no ha cometido ningún delito reconocido internacionalmente y debe ser puesto en libertad de inmediato.”
Información complementaria
Chu Kai-pong ha sido condenado hoy a un año y dos meses de prisión por “realizar con intención sediciosa uno o varios actos cuya intención era sediciosa” en aplicación del apartado 24 de la Ley de Salvaguardia de la Seguridad Nacional, el nuevo texto legislativo sobre seguridad nacional promulgado en marzo de 2024 y basado en el artículo 23 de la Ley Fundamental de la ciudad.
Es la primera persona acusada, declarada culpable y condenada con arreglo a esta nueva ley. Fue detenido el 12 de junio de 2024, el aniversario de las protestas contra la extradición que tuvieron lugar en 2019, por llevar una camiseta en la que se leía “Liberemos Hong Kong, revolución de nuestra época” (el lema de dichas protestas) y una máscara amarilla sobre las que estaban impresas las letras “FDNOL”, la abreviatura en inglés de “Cinco demandas, ni una menos” (otra consigna). Lleva ya más de tres meses recluido y se le ha denegado la libertad bajo fianza.
Chu Kai-pong también había sido acusado de otros dos delitos —merodear y no presentar un documento de identificación para su inspección—, pero éstos fueron retirados después de que se declarara culpable del cargo de sedición.
Según el artículo 24 de la Ley de Salvaguardia de la Seguridad Nacional, las personas declaradas culpables de sedición puede ser encarceladas por un periodo de 7 años; y, si la sedición se lleva a cabo en connivencia con una “fuerza externa”, la pena máxima aumenta a 10 años. Anteriormente, este delito era punible con hasta 2 años.
El Consejo Legislativo de Hong Kong votó de forma unánime el 19 de marzo de 2024 la aprobación de la Ley de Salvaguardia de la Seguridad Nacional con arreglo al artículo 23 de la Ley Fundamental, la “mini-Constitución” de Hong Kong. La nueva ley sobre seguridad nacional aumenta las penas por actos relacionados con la sedición y contiene muchas disposiciones preocupantes, como el delito de “injerencia externa”, formulado de manera amplia e imprecisa.
Según los datos de Amnistía Internacional, 12 personas han sido detenidas por sedición —y 3 acusadas de este delito— en aplicación de la Ley de Salvaguardia de la Seguridad Nacional desde su promulgación.