El reconocimiento de los derechos humanos de las personas transgénero por parte del Tribunal Supremo podría mejorar la vida de un millón de personas, declaró hoy Amnistía Internacional.
Una sala del Tribunal Supremo integrada por dos magistrados ha resuelto que la discriminación basada en la identidad de género viola los derechos garantizados por la Constitución a la igualdad, la libertad de expresión, la intimidad, la autonomía y la dignidad. El Tribunal ha ordenado a los gobiernos central y estatales que reconozcan legalmente la autoidentificación de las personas transgénero como varones, mujeres o “tercer género” e implanten políticas de acción afirmativa y bienestar social para ellas.
“Esta sentencia podría cambiar significativamente la vida de unas personas que llevan años sufriendo la opresión”, afirmó Amnistía Internacional. “Reafirma los valores constitucionales de la inclusión y la igualdad, aunque mientras siga vigente el artículo 377 del Código Penal indio, la discriminación y la violencia basadas en la orientación sexual y la identidad de género seguirán siendo una amenaza. Con las elecciones en curso, la sentencia de hoy debería dar el impulso necesario para que el nuevo gobierno derogue esta ley absurda”.
El artículo 377 del Código Penal indio, que fue confirmado por una sentencia del Tribunal Supremo en diciembre de 2013, penaliza las relaciones sexuales consensuadas entre adultos del mismo sexo.