Ante la decisión de la Comisión de Protección de Datos de Noruega de prohibir la publicidad personalizada ilegal en las plataformas de Meta, Sherilyn Naidoo, asesora de política sobre tecnología y derechos humanos de Amnistía Internacional, ha manifestado:
“La decisión de Noruega de prohibir temporalmente a las plataformas digitales de Meta, entre ellas Facebook e Instagram, el seguimiento de usuarios en línea para enviarles publicidad sin su consentimiento es un positivo avance. Poder acceder a información en Internet es fundamental para ejercer derechos fundamentales. Sin embargo, es primordial que se respete el derecho a la privacidad durante el uso de las plataformas de redes sociales; no ha de ser un intercambio.
Las autoridades encargadas de la protección de datos en toda la UE y en el mundo en general deben seguir su ejemplo y adoptar medidas parecidas a corto plazo; a largo plazo, deberían promulgar normativa vinculante que prohíba la publicidad personalizada basada en prácticas de seguimiento invasivas.
Sherilyn Naidoo, asesora de política sobre tecnología y derechos humanos
El modelo de negocio basado en la vigilancia de Meta recopila y monetiza nuestros datos personales más íntimos, y esto es intrínsecamente incompatible con el derecho a la privacidad. Este modelo empresarial, además, incentiva la maximización de la participación en sus plataformas, lo que contribuye a propagar la desinformación, el discurso de odio y la discriminación en sociedades de todo el mundo.
Las autoridades encargadas de la protección de datos en toda la UE y en el mundo en general deben seguir su ejemplo y adoptar medidas parecidas a corto plazo; a largo plazo, deberían promulgar normativa vinculante que prohíba la publicidad personalizada basada en prácticas de seguimiento invasivas.”
Información complementaria
El 17 de julio, la Comisión de Protección de Datos de Noruega ordenó a Meta que dejara de mostrar anuncios personalizados basados en la actividad online y la ubicación estimada de los usuarios de las plataformas digitales de redes sociales de Meta en Noruega.
El 4 de julio de 2023, el Tribunal de Justicia de la Unión Europea resolvió que Meta estaba infringiendo el Reglamento General de Protección de Datos al privar a sus usuarios de dar su consentimiento libre e informado, en relación con su uso del seguimiento y los perfiles para fines de publicidad personalizada.
El 22 de mayo de 2023, la Comisión de Protección de Datos de Irlanda impuso a Meta una multa de mil millones de libras esterlinas por infringir el reglamento sobre protección de datos de la UE.
En 2020, Amnistía Internacional documentó cómo el modelo empresarial basado en la vigilancia de Meta y Google es intrínsecamente incompatible con el derecho a la privacidad y pone en peligro otros derechos.
En 2022, Amnistía documentó cómo los algoritmos orientados a los beneficios de Meta han impulsado contenido que incita al odio y la violencia contra comunidades marginadas, como los rohinyás en Myanmar.