Ante la noticia de que un tribunal ruso ha condenado al activista de oposición y defensor de los derechos humanos Andrei Pivovarov a pasar cuatro años en una colonia penitenciaria por cargos presentados en aplicación de la represiva ley sobre “organizaciones indeseables”, Marie Struthers, directora de Amnistía Internacional para Europa Oriental y Asia Central, ha manifestado:

“El injusto procesamiento de Andrei Pivovarov y la cruel pena de cárcel dictada contra él forman parte de una campaña de las autoridades rusas para instrumentalizar el Código Penal contra cualquiera que se atreva a ejercer su derecho a la libertad de expresión. Tanto el fallo de hoy como el artículo del Código en aplicación del cual se dictó son una vergüenza.”

El injusto procesamiento de Andrei Pivovarov y la cruel pena de cárcel dictada contra él forman parte de una campaña de las autoridades rusas para instrumentalizar el Código Penal contra cualquiera que se atreva a ejercer su derecho a la libertad de expresión.

Marie Struthers, directora de Amnistía Internacional para Europa Oriental y Asia Central

“Andrei Pivovarov debe quedar en libertad de inmediato y sin condiciones. Además, las autoridades deben derogar urgentemente la legislación sobre ‘organizaciones indeseables’ y garantizar que la ciudadanía puede ejercer su derecho a asociarse sin temor a sufrir represalias. Esta claro que esta legislación no se ocupa de las actividades delictivas, sino de reprimir cualquier forma de disidencia o crítica al gobierno. Sencillamente, no debería existir.”

En su alegato final ante el tribunal, el 11 de julio, Andrei Pivovarov afirmó: “Y aunque ahora se pisotee y se encarcele a quienes defienden el futuro, yo sé que el progreso es imparable, es inevitable que las cosas cambien a mejor y no falta mucho para que estos cambios se produzcan. Nos vemos en nuestra nueva Rusia, atractiva y abierta. ¡Saldremos adelante!”

Información complementaria

El 15 de julio, el Tribunal de Distrito de Leninsky en Krasnodar (sur de Rusia) condenó a pasar cuatro años en una colonia penitenciaria a Andrei Pivovarov, exdirigente del movimiento Otkrytaya Rossiya (Rusia Abierta), fundado por el crítico del Kremlin Mikhail Khodorkovsky y actualmente desmantelado. Pivovarov fue declarado culpable de dirigir una “organización indeseable”, en aplicación de una ley que vulnera claramente el derecho de asociación. Los cargos tienen que ver con al menos 30 publicaciones que compartió en las redes sociales explicando las actividades del grupo dirigidas por él.

La represión se produjo tras la prohibición por las autoridades rusas de una organización radicada en Reino Unido llamada Open Russia (Rusia Abierta) en abril de 2017, que originó represalias generalizadas contra el grupo homónimo ruso (Otkrytaya Rossiya). El movimiento Otkrytaya Rossiya de Andrei Pivovarov había suspendido todas sus actividades varios días antes de la detención del activista en San Petersburgo el 31 de mayo de 2021, cuando lo sacaron de un avión en el que había embarcado con destino a Varsovia y quedó detenido en espera de juicio.