Las autoridades de Rusia deben poner en libertad de inmediato a Murad Amriev, sobreviviente de tortura checheno, y bajo ninguna circunstancia deben hacer peligrar más su vida entregándolo a las autoridades chechenas, ha dicho hoy Amnistía Internacional.
Murad Amriev trató de huir a Bielorrusia esta semana, motivo por el cual fue detenido y entregado ilegalmente a agentes de policía rusos esta mañana. Actualmente está bajo custodia en un lugar desconocido de Rusia, lo cual hace temer por su suerte.
La historia de Murad Amriev parece una novela de suspenso, pero es real y su vida está en juego. A primera hora de la mañana fue ‘entregado’ a las autoridades rusas en lo que constituye una entrega ilegítima después de su intento de conseguir asilo en Bielorrusia. Las autoridades federales rusas no deben bajo ninguna circunstancia entregarlo a funcionarios chechenos encargados de hacer cumplir la ley, pues esto podría ponerlo en peligro de tortura o de muerte.
Murad Amriev, campeón de artes marciales mixtas en la categoría amateur, fue detenido por agentes de la policía bielorrusa cuando trataba de cruzar la frontera de entre Rusia y Bielorrusia la noche del 7 al 8 de junio. Lo esposaron a un radiador en la comisaría de Dobrush (Bielorrusia) y le dijeron que lo devolverían a Chechenia para ser procesado. Mientras estaba bajo custodia, Murad Amriev solicitó asilo en Bielorrusia y ver a su abogado, pero ambas peticiones le fueron denegadas.
Según los informes, a primeras horas de esta mañana la policía bielorrusa lo entregó a funcionarios rusos encargados de hacer cumplir la ley. Se desconoce su suerte y paradero actuales.
Tortura y huida de Chechenia
Murad Amriev huyó de Chechenia en 2013 tras denunciar haber sido sometido a tortura por agentes de la policía chechena en Grozni. Desde entonces vive exiliado en Ucrania.
Este mes, viajó a Rusia para solicitar un visado Schengen, pero fue detenido en el oeste del país por cargos falsos relacionados con un error en la fecha de nacimiento de su pasaporte.
La policía de Bryansk, localidad del oeste de Rusia, lo puso en libertad el 6 de junio. Sin embargo,
cuando estaba en la fiscalía firmando los documentos para salir en libertad, el edificio fue rodeado por policías chechenos que amenazaron con detenerlo. Bryansk está a unos 1.800 kilómetros de Chechenia.
En una dramática huida, salió corriendo del edificio, montó en el automóvil de un familiar que lo esperaba y se dirigió a toda velocidad a la frontera bielorrusa.
No hay ningún fundamento jurídico para detener a Amriev por el delito menor de una equivocación en su pasaporte, un hecho que él nunca ha ocultado. Se encuentra recluido arbitrariamente y debe ser puesto en libertad de inmediato. Su vida podría depender de ello.