En respuesta a los últimos acontecimientos militares en la región de Jersón, Denis Krivosheev, director regional de Amnistía Internacional para Europa Oriental y Asia Central, ha declarado:
“Tras la retirada de las tropas rusas de la margen derecha del río Dniéper en Jersón, es importante dar prioridad a la conservación de los indicios de crímenes de guerra cometidos allí. Se debe hacer justicia con las víctimas de los crímenes de derecho internacional cometidos por Rusia contra Ucrania, y todas las personas responsables deben rendir cuentas en juicios justos".
“Aunque se trata de un importante acontecimiento militar, la experiencia de las últimas semanas indica que a medida que Ucrania recupera su territorio habrá más ataques rusos contra civiles e infraestructuras civiles. Hoy mismo, un ataque nocturno ruso con misiles ha destruido un edificio de viviendas en Mikolaiv, elevando el número de muertes de civiles".
“Aunque comprendemos el deseo de las autoridades y la población civil ucraniana de reconstruir y volver a habitar la región lo antes posible, conservar indicios de crímenes de guerra debe ser una prioridad, pues resulta esencial para garantizar una rendición de cuentas integral y permitir las investigaciones en curso de la Corte Penal Internacional y otros mecanismos de justicia nacionales e internacionales para procesar a los perpetradores de los más graves delitos previstos por el derecho internacional cometidos en suelo ucraniano".”