Los dirigentes de la Unión Europea (UE) acordaron una postura frente a los repentinos incrementos de llegadas a las fronteras de Europa y a los casos de “instrumentalización” de las personas migrantes, que permitiría a los Estados miembros de la UE desviarse de las normas habituales de asilo y recepción del bloque.
Eve Geddie, directora de la Oficina de Amnistía Internacional ante las Instituciones Europeas, advirtió: “Las personas que llegan a las fronteras de la UE deben poder solicitar asilo, tener un examen justo de su solicitud y ser recibidas con dignidad. Este acuerdo no servirá para mejorar la protección de solicitantes de asilo en la UE y con él se corre el riesgo de que estas personas queden atrapadas, detenidas o sumidas en la miseria a lo largo de las fronteras de Europa. Negar sus derechos a quienes solicitan asilo es peligroso, y es una respuesta desproporcionada a situaciones que los países podrían abordar perfectamente aplicando las normas existentes."
"El acuerdo de hoy también representa un paso más en las negociaciones sobre un paquete general de reformas sobre el asilo en la UE. Es fundamental que la prisa por alcanzar un acuerdo no dé lugar a que se releguen los derechos humanos en el proceso. Confiamos plenamente en que todas las instituciones de la UE insistan en la protección de estos derechos a medida que avancen las negociaciones en los próximos meses.”
El acuerdo alcanzado hoy permitiría a los Estados miembros de la UE demorar el registro de solicitantes de asilo, canalizar a un número muy superior de personas a través de procedimientos de asilo fronterizos de segunda categoría y ampliar la detención en la frontera. Amnistía Internacional ha documentado los significativos abusos contra los derechos humanos resultantes de estas políticas, como el uso de la detención arbitraria y la negación de acceso al asilo en Polonia, Letonia y Lituania desde 2021.
Adoptar la propuesta de regulación de la crisis vendría a normalizar aún más el uso de disposiciones de excepción en Europa para hacer frente a las llegadas. Debilitaría la coherencia del sistema común de asilo europeo y no evitaría que surjan situaciones de “crisis” en el futuro.
Amnistía Internacional pide a todas las instituciones de la UE que se abstengan de introducir medidas excepcionales adicionales en el derecho de la UE que socaven derechos fundamentales. La noción de la “instrumentalización” de las personas migrantes, es decir, las acciones de terceros países y agentes no estatales para facilitar las llegadas a la UE, deben rechazarse firmemente y no pueden servir para justificar más suspensiones de derechos.
Información complementaria
Tras los debates sostenidos en la reunión del Consejo de Justicia y Asuntos de Interior la semana pasada, los representantes de los Estados miembros han alcanzado hoy un acuerdo sobre una normativa de crisis y fuerza mayor. Esto permitirá que comiencen las negociaciones con el Parlamento Europeo sobre esta propuesta. Las instituciones confían en llegar a un acuerdo sobre éste y otros expedientes del Pacto Europeo sobre Migración y Asilo antes de que termine el año o a principios de 2024.
Amnistía Internacional ha advertido repetidamente de que la propuesta de normativa de crisis y fuerza mayor, presentada por la Comisión Europea en septiembre de 2020, así como la normativa sobre instrumentalización, propuesta en diciembre de 2021 y que se ha incorporado a esta propuesta, suscitan motivos de profunda preocupación por los derechos humanos y el derecho de asilo en Europa, y ha pedido que se rechacen.