Aleksandra (o Sasha) ha llenado su vida de arte y música. En épocas mejores, disfrutaba tocando el piano, la guitarra, la mandolina y la flauta, y organizaba sesiones de improvisación para todo el que quisiera tocar con ella.
Preocupada por la invasión rusa de Ucrania, Aleksandra decidió movilizarse el 31 de marzo de 2022. En un supermercado de San Petersburgo sustituyó etiquetas de precios por otras con información sobre la invasión de Ucrania por Rusia.
A primera hora del 11 de abril de 2022, la policía detuvo a Aleksandra y la acusó de “propagar a sabiendas información falsa sobre el uso de las fuerzas armadas de la Federación Rusa”, nuevo artículo del Código Penal aprobado a toda prisa por el gobierno en marzo de 2022 para evitar las críticas de la población rusa por la invasión de Ucrania.
Ya han sido detenidas decenas de personas por este nuevo delito. Aleksandra permanece bajo custodia desde entonces, soportando condiciones atroces.
Padece la enfermedad celiaca y la mayor parte del tiempo se ve obligada a pasar hambre porque el centro de detención no le proporciona la alimentación sin gluten que necesita. Aleksandra también sufre hostigamiento del personal del centro de detención y de compañeras de celda.
Si es declarada culpable, podría tener que cumplir hasta 10 años de prisión.