Justyna Wydrzyska, cofundadora del colectivo Aborto-Equipo Soñado en Polonia, enfrenta una condena de ocho meses de servicios a la comunidad por haber ayudado a una mujer en una situación desesperada a acceder a un aborto seguro. A pesar de que su equipo de defensa ha presentado un recurso, esta sentencia condenatoria podría sentar un peligroso precedente. Justyna y su colectivo luchan contra el estigma del aborto y brindan asesoramiento sobre el acceso al aborto en un país con una de las legislaciones más restrictivas de Europa.
Exigí la anulación de esta injusta condena y el respaldo a la valiente labor de Justyna en el acceso a información y apoyo en temas de salud reproductiva.