Se desconocen la suerte y el paradero de Aleksei Navalny desde el 5 de diciembre, última vez que sus abogados supieron de él. El 11 de diciembre, funcionarios de la colonia penitenciaria donde cumplía una condena injusta de 19 años les notificaron que ya no figuraba en el listado oficial de presos del centro. Es posible que lo estén trasladando a otra colonia penitenciaria, en cuyo caso pueden pasar semanas sin que a sus familiares les faciliten información alguna. Además, los traslados casi siempre ponen en peligro la salud y el bienestar de las personas afectadas, que están expuestas a sufrir hostigamiento y malos tratos. Desde su detención arbitraria en enero de 2021, las autoridades penitenciarias siempre han sometido a Aleksei Navalny a un trato de especial dureza.

 

ACTÚEN: REDACTEN SU PROPIO LLAMAMIENTO O UTILICEN LA SIGUIENTE CARTA MODELO

 

Arkady Aleksandrovich Gostev

Director of the Federal Penitentiary Service / Director del Servicio Penitenciario Federal

14, Zhitnaya Street,

GSP-1

119991 Moscow

Federación Rusa

Correo-e: udmail@fsin.gov.ru

 

Sr. Director del Servicio Penitenciario Federal:

Me alarman los informes según los cuales las autoridades penitenciarias se han negado a desvelar la suerte y el paradero de Aleksei Navalny tras la última vez que se supo que estaba bajo custodia en la colonia penitenciaria IK-6, en la provincia de Vladimir. Me preocupan también profundamente no sólo el encarcelamiento injusto de Aleksei Navalny, sino también el hecho de que las administraciones penitenciarias que dependen del Servicio que usted dirige lo traten constantemente con especial dureza. Por lo que sé, las autoridades rusas se han negado a facilitar información sobre la suerte y el paradero de Aleksei Navalny desde la última vez que sus abogados supieron de él, el 5 de diciembre. Aunque existe la posibilidad de que esté en tránsito hacia otra colonia penitenciaria, las autoridades tienen la obligación de facilitar sin demora información sobre los traslados de presos.

Las condiciones penitenciarias de Aleksei Navalny son constitutivas de tortura u otros tratos crueles, inhumanos o degradantes, y esta situación no hace sino incrementar los peligros a los que se enfrenta. Sé que Aleksei Navalny ha estado en 23 ocasiones en una celda de aislamiento de castigo (las llamadas SHIZO). Durante su permanencia en ese tipo de celdas tenía prohibidas las visitas de su familia y la comunicación telefónica con ella: Aunque por ley tiene derecho a recibir visitas, su familia no ha podido visitarlo ni una sola vez en más de un año, y también tiene prohibido recibir cartas de familiares. Además, tiene como máximo 15 minutos para comer, y sufre otras restricciones para comprar comida suplementaria en la tienda de la cárcel. Este trato pone en peligro la vida y la salud de Aleksei Navalny.

Los reiterados castigos que las administraciones penitenciarias imponen a Aleksei Navalny no son sino represalias por sus legítimas actividades políticas y su activismo legítimo en el marco de la sociedad civil. Resulta evidente que su finalidad es endurecer aún más las condiciones que Navalny soporta en prisión donde, para empezar, no debería encontrarse.

Le insto a que proceda de inmediato a: Revelar la suerte y el paradero de Aleksei Navalny. Aunque comprendo que no tiene facultades para dejar en libertad a Aleksei Navalny, —quien, no obstante, debería quedar libre de inmediato y sin condiciones— le insto también a asegurarse de que está protegido frente a la tortura y otros malos tratos y a cerciorarse de que en cualquier institución penitenciaria y en los tránsitos entre una y otra reciba un trato acorde al derecho y las normas internacionales. Las personas presuntamente responsables de los malos tratos infligidos a Aleksei Navalny, incluidas las que formen parte de la administración de la colonia IK-6, deben ser suspendidas sin demora de sus funciones, y usted debe garantizar que sean sometidas a los procesos disciplinarios, administrativos o penales que correspondan.

Atentamente,

Información complementaria

 

Aleksei Navalny es un destacado político de oposición ruso, activista anticorrupción y crítico con el presidente Vladimir Putin y con el gobierno ruso. En agosto de 2020, fue envenenado con lo que análisis periciales posteriores identificaron como agente neurotóxico Novichok, de uso militar. Las autoridades rusas accedieron a permitir su traslado a Berlín (Alemania) en coma, para que fuera atendido allí.

Tras haberse recuperado, el 17 de enero 2021 Aleksei Navalny regresó a Moscú, donde fue detenido arbitrariamente de inmediato. Fue acusado de haber violado el régimen de libertad condicional de una condena anterior no privativa de libertad, impuesta por motivos políticos. El 4 de febrero de 2021, esa condena condicional fue sustituida por otra, privativa de libertad, de dos años y ocho meses de reclusión. El 22 de marzo de 2022, Aleksei Navalny fue declarado culpable de nuevos cargos arbitrarios de motivación política –entre ellos, el de fraude— y condenado a nueve años más de cárcel. Posteriormente, el 4 de agosto de 2023, fue condenado de nuevo a un total de 19 años, tras haber sido declarado culpable de cargos tales como financiación y promoción del “extremismo” y “rehabilitación de la ideología nazi”.

El 1 de diciembre de 2023, las autoridades presentaron nuevos cargos contra Aleksei Navalny, esta vez en aplicación de la Sección 2 del artículo 214 del Código Penal de la Federación Rusa (“vandalismo por motivos de odio o cometido por un grupo de personas”)

En todas las instituciones penitenciarias en las que ha estado desde su detención, Aleksei Navalny ha sido constantemente sometido a un trato de especial dureza. Navalny cumplía condena en la colonia penal de régimen estricto (máxima seguridad) IK-6, en la provincia de Vladimir (240 kilómetros al este de Moscú), pero de conformidad con su última condena —a menos que ésta sea anulada en apelación— se ordenó su traslado a una colonia penitenciaria de “régimen especial” (un régimen penitenciario aún más duro que el de su colonia actual).

Durante su estancia en la cárcel, Aleksei Navalny ha sido encerrado en repetidas ocasiones en celdas de castigo por presuntas violaciones de la disciplina penitenciaria. En concreto, ha estado 23 ocasiones en las llamadas SHIZO (celdas de aislamiento de castigo), donde no podía recibir visitas ni cartas, ni hacer ejercicio o pasear por el exterior, y tampoco tenía oportunidad de comprar comida en la tienda de la cárcel.

Las Reglas Mínimas para el Tratamiento de los Reclusos de la ONU definen el régimen de aislamiento prolongado como un periodo de 15 días o más, durante el cual la persona reclusa pasa al menos 22 horas diarias sin contacto humano apreciable. El régimen de aislamiento prolongado constituye una violación de la prohibición absoluta de la tortura y de otros tratos o penas crueles, inhumanos o degradantes.

En Rusia, la ley limita a 15 días consecutivos el periodo máximo de permanencia de una persona en una SHIZO, pero, a 27 de septiembre de 2023, Navalny ya había pasado 12 meses en una ERKT (celda de aislamiento penal de tipo simple), lo cual constituye el castigo disciplinario más duro y prolongado para una persona presa, reservado a “infractores reincidentes” de la disciplina penitenciaria. No se sabe si durante este tiempo ha estado compartiendo celda con otros presos.

El 12 de diciembre de 2023 se hizo evidente que Navalny no figuraba ya en el listado oficial de la colonia penitenciaria IK-6. Las autoridades rusas se han negado a facilitar información sobre la suerte y el paradero de Aleksei Navalny desde la última vez que sus abogados supieron de él, el 5 de diciembre. Aunque existe la posibilidad de que esté en tránsito hacia otra colonia penitenciaria, las autoridades tienen la obligación de facilitar sin demora información sobre todos los traslados de presos. Amnistía Internacional ha documentado en otras ocasiones las prácticas crueles e inhumanas que utilizan las autoridades rusas durante los traslados de personas presas. En Rusia, estos traslados pueden durar semanas sin que se facilite ninguna información a las familias, y casi siempre ponen en peligro la salud y el bienestar de las personas que son trasladadas, expuestas a malos tratos y hostigamiento.

 

PUEDEN ESCRIBIR LLAMAMIENTOS EN: ruso e inglés.

También pueden escribir en su propio idioma.

 

ENVÍEN LLAMAMIENTOS LO ANTES POSIBLE Y NO MÁS TARDE DEL: 1 de febrero de 2023

Consulten con la oficina de Amnistía Internacional de su país si desean enviar llamamientos después de la fecha indicada.

 

NOMBRE Y GÉNERO GRAMATICAL PREFERIDO: Aleksei Navalny (masculino)

Publicado el 19 de diciembre de 2023